¿Es Hublot el amo del zafiro? Alucina con el Big Bang Tourbillon Automatic SAXEM Amarillo Neón

Caja translúcida amarilla como fluorescencia eléctrica. El lanzamiento ha tenido lugar en la LMVH Watch Week que celebra el grupo en Singapur. Hublot Big Bang Tourbillon Automatic Saxem Amarillon Neón es la última pieza más potente de la manufactura de Nyon. Y si alguien tenía dudas sobre la firma suiza que mejor conceptualiza y fabrica relojes con el zafiro, aquí se resuelve del dilema. Alucina con tonalidad de la caja de este Amarillo Neón cuya esfera es también de zafiro.

El secreto del SAXEM

El secreto está en el material. El SAXEM ya lo utilizó Hublot para su Big Bang MP-11 en 2019. Un desafío técnico que la firma descubrió en la estratosfera. El SAXEM (Sapphire Aluminium oXyde and rare Earth Mineral) es un material de alta tecnología que se emplea para los satélites. Una aleación de óxido de aluminio —el componente básico del cristal de zafiro— con tierras tan raras como el tulio, el holmio y el cromo. El resultado es de aspecto similar al propio zafiro, pero con más brillo y más resistencia.

Como gran alquimista innovador, Hublot ha logrado manufacturarlo para convertirlo en un reloj de aspecto inédito. Tono homogéneo y transparencia absoluta para que su llamativo color amarillo Neón encuadre el espectáculo mecánico. Una caja totalmente pulida que presenta los seis característicos tornillos en H sobre el bisel y la corona en titanio.

Tourbillon transparente

“Después del MP-11 verde esmeralda, nos ha costado casi tres años de investigación desarrollar un nuevo tono capaz de revestir nuestro Big Bang con una transparencia absoluta y una resistencia total. Una vez más, hemos superado los límites de lo posible en términos de tecnología y estética, fusionándolos en un ejemplar de desarrollo interno de un color inédito: el Yellow Neon”, asegura Ricardo Guadalupe, CEO de Hublot.

Este nuevo Big Bang Tourbillon Automatic SAXEM Amarillon Neón monta el calibre HUB6035 de manufactura. Interesante la ejecución técnica de optar por un microrrotor para un poderoso tourbillon automático que aporta 72 horas de reserva de marcha. Hublot quería mantener la máxima transparencia en un calibre esqueletado que exhiba, sin pudor, todo el corazón palpitante de la pieza.

Un desnudo integral que permite mostrar su dispositivo antigravedad como suspendido en el vacío. Es realmente extraordinario lograr todos los colores que está conquistando Hublot para el zafiro. La pieza incluye una correa de caucho con textura creada a medida, también en Neon Yellow, con hebilla desplegable de titanio y dotada del sistema One Click para poder cambiarla de forma inmediata sin necesidad de utilizar herramientas. Una estética potente, con sólido desarrollo técnico, que tanto gusta a los fans de Hublot.

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