El CEO de A. Lange & Söhne, Wilhelm Schmid, no duda en absoluto. Nunca seguirá las tendencias y mantendrá a su marca tan exclusiva como siempre. Producen 5,500 relojes al año y aumentar la producción implica cesiones de calidad que no está dispuesto a asumir.
¿Qué tiene que decirnos de los lanzamientos de este año?
A nuestros clientes les gustan las sorpresas, especialmente las positivas. Hay mucho que celebrar en 2024. Este año decidimos brindar por los 25 años de Datograph, que es un reloj importante para nosotros. ¡Y qué mejor para celebrar un aniversario que dos bonitos relojes! Así que uno es un Datograph Up/Down en azul. Nunca habíamos tenido esa combinación en este modelo. Es la primera vez que se ve blanco, dorado y azul. Y, hay algo en nuestro azul que se remonta a finales de los 90, cuando lo usamos por primera vez. Desde entonces siempre es el mismo azul. Así que el azul del Odysseus, el azul del Triple Split es el mismo azul que se puede ver en el Datograph. Es algo muy atractivo. Produciremos 125 piezas de este modelo para celebrar los 25 años del Datograph.
En el booth de Watches & Wonders cuando entras ves una selección de nuestros cronógrafos, tourbillones, calendarios perpetuos y relojes para mujer. En el centro, está todo en un solo reloj. Tuvimos que cambiar muchas cosas en el movimiento para adaptarlo al Datograph Perpetuo Tourbillon Honeygold “Lumen“. La fase lunar es ahora un cristal, ya no un disco. Eso suena fácil, pero no lo es. Tuvimos que quitar la indicación de reserva de marcha porque es un cristal. La esfera está hecha de cristal. Así que, si cortas aquí, ya no puedes asegurar la estabilidad de la esfera. Así que tuvimos que reelaborar el movimiento.
¿Cómo logran el efecto Lumen en el zafiro?
El secreto está primero en el cristal, porque permite que la luz ultravioleta pase y cargue el material luminoso, que está recubriendo la fase lunar, las esferas y la cruz y el disco para la fecha. Un reloj muy complejo pero muy ponible. No tengo muñeca enorme pero lo uso y me sienta muy bien. Es una de las ventajas de ser CEO de una empresa. Puedes llevar los prototipos.
¿Es tu nuevo reloj del diario?
Espero (sonrisa). Creo que esta pieza saldrá de viaje cuando acabemos aquí (Watches & Wonders) porque solo tenemos tres prototipos y se han usado en todas las boutiques del mundo.
¿Ve un nuevo camino para traer más detalles ‘funky’ como la luminiscencia general sobre modelos clásicos?
Solo vamos a producir 50 de ellos. Es el viejo problema de las ediciones limitadas. Si tienes una gran edición limitada se convierte también en un reto porque normalmente hay más clientes que quieren eso.
¿Cómo ve el panorama relojero donde el éxito se atomiza entre unas pocas marcas y algunos creadores independientes?
La complacencia siempre es peligrosa. En el momento en que te sientes demasiado cómodo con tu posición suele ser el principio de un problema. Afortunadamente no está en nuestros genes volvernos complacientes. Lo que es magnífico son los independientes que vienen porque nos ofrecen nuevos puntos de referencia. Con ellos competimos. Ahí es donde tenemos que estar atentos. Nunca podremos competir con las grandes marcas porque producen decenas de miles de relojes y su relojería es muy diferente a la nuestra.
Elaboramos 5,500 relojes al año y necesitamos 600 personas para operar su fabricación. Si produces muchos más relojes necesitarás edificios muy grandes. ¿Y de dónde sacas los artesanos para hacer el arte que necesitamos para nuestros relojes? Podemos crecer en capacidad pero es un proceso lento y no significa que la aplicaremos a más cantidad de piezas. En los últimos siete años hemos visto un mayor apetito hacia relojes más complejos.
¿Por qué las marcas con mayor prestigio se mantienen con pocos cambios en sus modelos?
Fácil, porque nadie quiere gastar un dineral en un reloj y que mañana parezca anticuado.
Pero eso no ocurre con las mejores firmas de autos.
En primer lugar no hay que subestimar el efecto de los requisitos de homologación, la seguridad de los pasajeros, de los peatones, el ahorro de combustible… Así que, para ellos, no se trata solo de diseño, sino también de cumplir con todos los requisitos que se imponen globalmente en la industria automotriz. Nosotros no tenemos eso. Nadie está comprobando qué pasa si se desliza el reloj, si puede dañar a alguien y eso es un privilegio. La segunda cosa es que los coches en general son consumibles con un ciclo de vida. De todos los coches que se han construido desde 1889 alrededor del 98% se han ido. Los relojes no son consumibles. De todos los relojes de gama alta, incluidos los de bolsillo que hemos comprado en la historia, creo que el 90% sigue existiendo porque son obras de arte que pones en la muñeca o conservas.
¿Qué opinas del camino que ha tomado una casa histórica como Audemars Piguet que ha adoptado una estrategia más contemporánea en todo con muy buenos resultados?
Me parece maravilloso porque significa que el mercado es, incluso en la gama alta, lo suficientemente grande como para estrategias totalmente diferentes, pero nunca haríamos eso. Sabes que no hacemos eventos de alfombra roja, no tenemos embajadores de marca. Cuando veas a alguien usando uno de nuestros relojes, puede estar seguro de que lo compró, no se lo dimos gratis. Así que esa es nuestra estrategia. Pero observo las estrategias de los demás porque soy un coleccionista de relojes además de ser el CEO de A. Lange & Söhne.
¿Dónde está el límite para A. Lange & Söhne en la experimentación estética? ¿El titanio es algo atrevido para tu marca?
Creo que empujamos los límites en 2009 con el Zeitwerk. Ese es el reloj que mucha gente dijo que no era un A. Lange & Söhne y hoy es visto como uno de los relojes que, si se quita el logotipo, todo el mundo dirá que es de A. Lange & Söhne. Es una de nuestras declaración más fuertes. Cuando lanzamos el Odysseus en 2019 lo hicimos por diferentes razones. La primera es que era una petición de nuestros clientes. Porque llevar un ALS es más difícil cuando te vas de vacaciones. Pero también nos abrió un nuevo campo de juego porque tuvimos que tomar una decisión. La decisión era si empezábamos a jugar con distintos materiales en nuestras familias, como una versión en acero para Lange 1 o Zeitwerk o construiamos una nueva familia que nos permitiera jugar sin perder lo que realmente representamos. Así que lanzamos el Odysseus que hoy puede proponer oro blanco con correa de caucho por ejemplo. Algo que nunca haríamos con el Lange 1. El Odysseus admite el acero, el oro blanco, el caucho, el cuero, el titanio y ahora el cronógrafo. Así que da mucho juego.
¿El siguiente paso con Odysseus es el calendario perpetuo? Parece la evolución natural…
De momento, estamos muy contentos con lo que hay porque primero tenemos que producir lo que hemos lanzado antes de pensar en lanzar cosas nuevas. Pero Odysseus es una nueva familia, que solo lleva cinco años formándose, que con el tiempo crecerá y se establecerá como el campo de juego para que probemos otros materiales. Nunca seguiremos las tendencias. Nunca jamás. No es lo nuestro. Si nos fijamos en los Datograph, los de 1999 y los nuevos no tienen muchas diferencias, podrían estar en la misma colección. Hay con reserva de marcha, sin reserva de marcha… Y eso es lo que queremos asegurarnos, que, independientemente de lo que se nos ocurra, nunca es nuevo o viejo.
¿Tampoco les interesan los cronógrafo con correa de caucho, que son otra tendencia?
Fuimos los primeros en hacer hincapié en los cronógrafos. Y si nos fijamos en el número de cronógrafos que tenemos en nuestra colección actual, creo que es difícil de superar con todas las cosas diferentes que hacemos. Los cronógrafos no eran una tendencia hace siete años, ¿cierto?
El cronógrafo siempre es tendencia.
O nunca. Empezamos a trabajar en eso hace siete años. Así que no se puede seguir la tendencia si tienes un plazo de siete años en el desarrollo de productos. Ninguno de los dos tenemos ni idea de lo que el consumidor considere tendencia en 2030, esos son siete años por delante.
Estos pequeños detalles, como el Lumen, son una experimentación, una evolución de detalles sutiles. ¿En qué otros campo ves posibilidades de evolución sin seguir tendencias?
En lo que sea que esté en línea con nuestro ADN.
¿Me puedes dar más detalles?
La artesanía. Nunca entraremos en lo mecánico. Eso no es lo nuestro. Si no hay artesanía hecha a mano en ello, no es para nosotros. Así que siempre lo he dicho, escapes de silicio y todo eso, no es para nosotros, porque nos sigue gustando la idea de que alguien luche para regular el reloj. El silicio es más para una producción en masa es algo típico de la industria de consumibles, porque resulta una inversión alta en las máquinas para producirlo al principio y es muy bajo después el coste por unidad.
¿Dónde está el límite de la producción masiva? ¿Una marca que produce 50,000 relojes es un producto masivo?
Sí, creo que lo que hacemos y cómo lo hacemos es muy difícil de hacer en un número mucho mayor de lo que hacemos hoy. Así que nuestro plan es realmente no aumentarlo porque sé que si lo aumentamos sacrificaremos la calidad. Porque tienes que tomar atajos o tendrías que reducir la complejidad de tu cartera de productos, lo que tampoco es bueno. Así que esas son las dos únicas formas de aumentar nuestra producción y ninguna es realmente ideal para nosotros.
¿La demanda para A. Lange & Söhne está más en la técnica de alto nivel o en piezas clásicas más sencillas?
En ambas. Hemos reducido la producción del Saxonia delgado de forma dramática, porque necesitábamos la capacidad para el Lange 1 y así sucesivamente. Ahora es difícil encontrar un Saxonia delgado. Para nosotros, la decoración, el amor al detalle, el acabado y todo eso es exactamente lo mismo para el Saxonia que para el Datograph. Así que no hay diferencia en la calidad, la diferencia está en los años que nos llevó desarrollarlo. Es una diferencia en el número de piezas, en la capacidad relojera que tienes para montar el reloj. Pero esa es la única diferencia.
La vida contemporánea es muy casual, elegante, audaz, que pide relojes que puedas usar en actividades casuales.
Sí, toma su Lange 1 de platino, una correa de cuero beige alrededor. Vas en shorts y camisa y te ves perfectamente vestido.Toma un cronógrafo 1815 o un Datograph. No tienes que preocuparte que tan casual vayas vestidos porque también puedes llevarlo. Con la excepción, tal vez, de Saxonia Aventurina, que es un reloj de esmoquin. Pero la mayoría de los otros relojes se pueden combinar fácilmente con lo más informal. Y no olvides que todos nuestros relojes son al menos resistentes al agua hasta 30 m, lo que es una buena red de protección en caso de que llueva o se caiga, que puede ocurrir. Solo hay que limpiar la correa de cuero, no el reloj.
¿Con qué va bien usar el nuevo Datograph azul?
Toma una camisa blanca, pantalones cortos azules, este reloj alrededor de su muñeca. Hasta puedes usar chanclas y la gente no va a decir que estás demasiado vestido (risas).
¿Y es posible llevar el caucho a la colección clásica también?
No. Los clientes pueden hacerlo, pero nosotros no. Eso no está en mi poder. Por eso tenemos el mundo de Odysseus.