En la ciudad de Gustavia. De Le Brassus al exótico paraje caribeño. Es la primera boutique exclusiva de la marca en San Barth. Y más que un concepto de punto de venta, es un destino para los coleccionistas y seguidores de la firma que cuenta con oferta de ocio y entretenimiento. Así es una AP House. Abrimos sus puertas.
Ya apuntaba públicamente como tendencia François-Henry Bennhamias, CEO de Audemars Piguet, que las marcas cortarán relaciones con los retailers, excepto aquellos más excepcionales. Y como muestra un botón. O una AP House. Un ambiente isleño que se fusiona con sofisticado diseño. “¿Cómo podríamos mejorar su experiencia en Audemars Piguet?”, se preguntó el equipo de la maison. Y han recreado un ambiente donde los mismos Jules Louis Audemars y Edward Auguste Piguet pudieran atender a sus clientes y compartir la pasión por los relojes.
AP House caribeña
“Estamos muy ilusionados con la apertura de esta nueva AP House en San Barth. Representa la mezcla perfecta entre la tradición de renombre Audemars Piguet y un ambiente isleño desenfadado”, comenta Juan Carlos Suárez, General Country Manager. Un hogar cálido y un ambiente amistoso. La AP House de San Bartolomé cuenta con 142 metros cuadrados donde el distintivo toque contemporáneo de la decoración juega con la belleza natural de la ubicación. Una isla donde se para el tiempo.
Un escenario con vistas al océano. Y un espacio con tablas de roble oscurecido a modo de pérgola. Y espejos murales que provocan juegos de luces que reflejan el océano tras las ventanas. El mobiliario es de roble envejecido. Cuenta también con un bar acogedor con las vigas blancas propias de las construcciones locales. Un acento con los rasgos más tradicionales y singulares de San Barth. La casa anuncia que se celebrarán eventos exclusivos en el salón para descubrir las últimas creaciones de la manufactura, su legado y su savoir-faire. Relajarse, reflexionar y disfrutar de la alta relojería. Así es una AP House.