El 24 de octubre de 1994 la firma alemana comenzó una nueva era. Fue el día en que el fundador de la empresa Walter Lange y su socio Günter Blümlein lanzaron en el Palacio Real de Dresde los primeros cuatro relojes de pulsera de la nueva fundación, entre ellos el Lange 1, que destacó por su diseño que resalta la fecha con números grandes y el doble barrilete que llamaron la atención del público de manera inmediata.
Para conmemorar los 25 años de este modelo, la empresa alemana ha lanzado una edición especial de 250 piezas de oro blanco, Lange 1 25th Anniversary, donde resalta su esfera de plata con índices azul oscuro, fecha en azul y correa de piel de aligátor azul y costura hecha a mano en gris .
Este modelo se fabrica casi sin modificaciones externas desde 1994. Sin embargo, su desarrollo técnico se aprecia en el mecanismo L121.1 de manufactura, con cuerda manual y una reserva de marcha de 72 horas. La caja es de oro blanco y mide 38.5 mm.
Todas las piezas llevan un grabado de serie limitada con el número 25, el cual representa el símbolo de su cuarto de siglo. Además por primera vez, las líneas hechas a mano del nuevo modelo del grabado están pavonadas, lo que hace un resalte en total armonía con el diseño del reloj.
Hay que recordar que el relojero de Dresde Ferdinand Adolph Lange puso la primera piedra de la relojería de precisión con la fundación en 1845 de su manufactura relojera sajona. Sus valiosos relojes de bolsillo siguen siendo muy codiciados entre los coleccionistas. La empresa fue expropiada tras la Segunda Guerra Mundial y el nombre A. Lange & Söhne cayó casi en el olvido. En 1990 Walter Lange, bisnieto de Ferdinand Adolph Lange, se aventuró a comenzar de nuevo. Hoy se fabrican en Lange solo unos pocos miles de relojes de pulsera de oro o platino al año. En ellos trabajan únicamente los mecanismos desarrollados y laboriosamente decorados y montados a mano en la propia casa.
Con 62 calibres de la manufactura desde 1994, Entre los grandes éxitos destacan los iconos de la marca como el Lange 1, con la primera gran fecha en un reloj de pulsera fabricado en serie, y el Zeitwerk, con su indicación de las cifras saltantes exactas.