
Cuando el tiempo habla
Tiempo de Relojes #138 Verano 2025
La pregunta se repite ¿Cómo ves el año? Y siempre digo lo mismo: bien. Para algunos debo sonar irresponsable en pleno reguetón arancelario. El mismo optimismo desde hace 138 cartas editoriales. Yo digo que es realismo porque llevamos 29 años de Tiempo de Relojes con el reloj en signo ascendente. Primero fue la gripe aviar, después las subprime, siguió el efecto Apple Watch y para rematar, la pandemia. Y las subastas del pasado mayo batieron récords de nuevo. Creo que dejé de ver a estas criaturas como productos de consumo. ¿Si no, qué hacen todas las celebrities de la tierra pidiendo relojes prestados para recibir un Óscar o un León de oro, o lucir muñeca en la Met Gala? Nada expresa mejor cuánto vale el tiempo de los dioses que lo que llevan en el brazo. A los humanos se nos pueden nublar las ideas en una tormenta comercial, pero cuanto más prospera la Inteligencia Artificial más relojes buenos se venden en Silicon Valley. Que se lo pregunten al coleccionista Mark Zuckerberg. La semana pasada di una conferencia en Tressor sobre inversión en relojes y las gráficas de EveryWatch volvían a mostrarse ascendentes después del ajuste de la última burbuja post covid. Al menos para los modelos más buscados. 2025 lo recordaremos por ser el año del Land-Dweller, el Vacheron Constantin Solaria, el reloj de pulso más complicado hasta la fecha, el año que Audemars Piguet abrió la era de la ergonomía (es algo más que comodidad), cuando Hublot celebró los 20 años de armar la fiesta por dentro y por fuera con el Big Bang, y el cuarto de milenio de Breguet festejado con un reloj de una simple aguja, como en sus orígenes. Tal vez no serán 12 meses buenos para todos. Seguramente les irá mejor a los que ven las máquinas de dar la hora como arte y menos como un simple negocio. Y a los que piensan en el largo plazo más que en la cotización del momento del oro y el tipo de cambio. Por eso, hemos elegido a propósito algunos modelos eternos, como el Tank Louis Cartier o el Arnold & Son Constant Force Tourbillon que mira atrás con nostalgia. Porque cuando el tiempo habla, hoy no hay mucho más que decir.