Gracias al enfoque artístico aplicado a la alta relojería, Fiona Krüger ha conseguido hacerse un hueco en el universo de la alta relojería. Sus relojes Skull tienen forma de calavera y calibre de alto desempeño. La firma relojera independiente nació en 2013. Este año se ha asociado con L’ Epée, 1839, la manufactura suiza más prestigiosa de relojes de pared, para lanzar Vanitas.
El nombre del reloj hace referencia a un género de pintura que floreció en los Países Bajos y Flandes en los siglos XVI y XVII. El nombre es latino, y significa “vacuidad”. Es la palabra de la que se obtiene “vanidad”, que puede significar que alguien tiene una muy alta opinión de sí mismo, pero que también hace alusión al vacío existencial de los seres humanos. Esta segunda idea es la que está detrás de la creación de Krüger y L’ Epée, un reloj escultura para recordar que la única certeza existencial es la muerte y recordarla da perspectiva a la vida. Las pinturas de este género pictórico utilizaban símbolos particulares para recordar la naturaleza transitoria de la vida, como fruta madura, relojes y cráneos.
Igual que en sus primeros relojes, a Fiona le siguen inspirando el Día de Muertos de México y el reloj de la reina María de Escocia del siglo XVII. Vanitas también tiene un toque de humor, como el innovador indicador de reserva de marcha en forma de “bostezo” que ha exigido un desarrollo nuevo y reingeniería del movimiento original del reloj. El diseño único de la calavera imitando el bostezo es una metáfora que trae la muerte a la vida y refleja la historia de la relojería donde la fantasía, la creatividad y el propósito se incorporaron en la misma medida para crear diseños que hacen soñar a la gente.
Eso sí, los componentes son más grandes. Arnaud Nicolas, CEO de L’Epée, explica que no solo son más grandes sino que necesitan doble de tiempo para los acabados. “La complejidad crece exponencialmente. Para pulirlos necesitas aplicar la misma presión que a un movimiento de reloj de muñeca pero sobre una superficie más grande y esto es un desafío mayor”.