El reloj Balancier, nueva incorporación a la familia de guardatiempos Greubel Forsey, condensa las cualidades de la firma en un guardatiempo sobrio. Después del Double Tourbillon 30°, el Quadruple Tourbillon, el Tourbillon 24 Secondes y muchas otras atrevidas complicaciones, como la Grande Sonnerie, el Balancier parecía un paso lógico. Greubel Forsey tenía pendiente crear un guardatiempo de gran pureza, dotado de un único volante.
El nuevo volante está dotado de seis tornillos de regulación de oro, es íntegramente de desarrollo propio y posee unas destacables cualidades aerodinámicas. La tecnicidad de este volante genera un poder regulador excepcional, garantía de una gran estabilidad cronométrica.