Si algo caracteriza a Hublot es su búsqueda constante por realizar relojes cuyo diseño sea diferente del resto. Esto lo podemos constatar con cada una de sus nuevas creaciones, donde demuestran su maestría en términos de innovación, excelencia y rendimiento.
Uno de sus grandes aliados en esta misión es Ferrari, la mítica empresa automotriz del cavallino rampante, con quienes ahora lanza nuevos Big Bang Ferrari, cronógrafos que representan un paso evolutivo para la propia colección Big Bang, uno de los emblemas de Hublot.
Este nuevo diseño combina las ideas siempre innovadoras de la firma relojera con el lenguaje visual de Ferrari. La silueta y proporciones perfectas son el toque de piedra en la nueva arquitectura de esta pieza. El contador de minutos y la fecha (colocado a las 3 h) están diseñados para simular el tacómetro de un automóvil, mientras que los números de la fecha imitan al velocímetro de Ferrari. El logo del corcel negro, referencia directa a la velocidad y excelencia de la empresa motor, aparece discretamente a las 6 h. Los números están alienados con los índices, que parecen flotar por encima de la esfera, lo que otorga un efecto 3D.
La caja logra un equilibrio prácticamente perfecto entre volumen, forma y funcionalidad. Por ejemplo, el contorno del bisel ha sido rediseñado con muescas avellanadas para los 6 tornillos, lo que genera un efecto ergonómico inédito. Alcanza los 45 mm de diámetro y se presenta en titanio (1,000 ejemplares), King Gold (500 ejemplares) y carbono (500 piezas). Su movimiento integra un cronógrafo flyback con una rueda de columnas posicionada en el lado de la esfera.
Posee cristal de zafiro con aplique Ferrari, reserva de marcha de 72 horas y correa de alcántara negra con costuras rojas.