Maurice Lacroix está en plan icónico con AIKONIC

Maurice Lacroix sigue aprovechando el impulso de su 50 aniversario con el lanzamiento de la nueva colección AIKONIC. Claramente inspirada en el espíritu urbano y juvenil de AIKON, el bestseller de la marca, AIKONIC tiene trazada su propia ruta de “innovación creativa” o IC. Esto significa que utiliza nuevos materiales y un nuevo movimiento automático, el calibre ML1000. Además, introduce un ingenioso sistema de cambio rápido de correa patentado.

El precio de AIKONIC de tres agujas y fecha ronda los 3,000 dólares, en consonancia con la filosofía de Maurice Lacroix de que la relojería mecánica de alta gama sea accesible al gran público. “Se trata de que la buena relojería se pueda compartir”, nos dijo Stéphane Waser, CEO de la firma, en el SIAR Summer 2025. En esa conversación, Waser también nos reveló los planes que se han hecho realidad con AIKONIC.

“El 50 aniversario no es solo un día, sino un año de celebraciones”, afirmó. “Empezamos con la colección 1975 y ahora tenemos que hacer algo con AIKON, nuestro producto más fuerte, con alrededor del 70% de las ventas. No vamos a tocarlo, porque es nuestro ‘mejor caballo’. Pero haremos una evolución y verán más rendimiento en términos de movimiento y con el uso de materiales. Se abre un bonito campo de juego con el nuevo concepto de colección”.

Lo nuevo: la caja y la esfera

La principal seña de identidad de AIKONIC es su esfera de carbono, un material generalmente asociado con relojes de mayor precio. Para diferenciarse, Maurice Lacroix incorpora numerosas fibras que se extienden de arriba abajo en una sola dirección. Esto crea un efecto de líneas grises y negras. Una diferencia con otras estructuras de fibra de carbono donde los hilos están entrelazados en ángulo y crean tejidos con patrones. La disposición de las fibras siempre es ligeramente distinta, así que cada esfera tiene un diseño único.

Con respecto a la caja, es de acero y mide 43 mm, uno más que el Aikon Automatic más grande. Combina superficies pulidas con cepillado vertical y se une a la correa mediante dos elementos brillantes en cada extremo. Cuenta con el característico bisel con seis brazos de doble ancho que ha estado presente en el AIKON desde que apareció en 2016. Estos brazos han influido en el diseño de las agujas y los índices. La caja mide 11 mm de grosor, un tamaño adecuado para un modelo con propuesta sport-elegant.

Algo importante es que el bisel del AIKONIC está hecho en cerámica cepillada y pulida con engastes arenados del mismo material. Esto ofrece varias ventajas, entre ellas que no perderá su color. Hay cuatro variantes del modelo: uno con bisel de cerámica azul, otro con bisel de cerámica blanca y dos más con bisel de cerámica negra e índices rodiados o turquesa. La corona, de acero con tapa de cerámica, tiene una forma cónica diferente a la del IKON. Los terminados y la construcción de los relojes reflejan la prioridad de la marca por ofrecer un alto valor percibido.

Lo nuevo: el movimiento y la correa

Como mencionamos, Maurice Lacroix estrena el calibre ML1000 en el AIKONIC. Se trata de un movimiento automático desarrollado en colaboración con el especialista Soprod. La marca subraya que el puente del volante está fijado con dos tornillos, “lo que proporciona una estabilidad superior y una atractiva simetría”. La masa oscilante es grande y tiene diseño calado. La media diaria de este movimiento es un respetable ± 4 segundos y ofrece una generosa reserva de marcha de 60 horas. Está decorado con Côtes de Genève y Colimaçon, y luce tornillos azules. Es visible a través del fondo de zafiro.

Otra novedad del AIKONIC es la correa de caucho de estilo deportivo con combinaciones cromáticas y de textura muy agradables a juego con el bisel. Además, debuta el sistema de cambio rápido ML patentado. Este sistema “permite a los usuarios retirar la pulsera para adaptar el tamaño del reloj sin utilizar ningún tipo de herramienta y sin cierres ni palancas visibles”, explica la firma de Franches-Montagnes.

Maurice Lacroix hace énfasis en que la nueva colección es “un producto del Jura suizo”. Se refiere a que estos relojes integran componentes locales de proveedores cercanos a su manufactura de Saignelégier. Por ejemplo, Soprod está a menos de 10 kilómetros, y para crear la esfera colaboró con una empresa especializada situada a unos 40 kilómetros.