El mundo de la alta relojería muestra ya su tendencia para el próximo año: rendir tributo al universo femenino. Son varias las firmas que desde ahora están presentando diversas colecciones para mujer, entre las cuales destaca la línea Rendez-Vous, emblema de Jaeger-LeCoultre. Nacidos en 2012, estos guardatiempos representan los conocimientos adquiridos por la casa a lo largo del tiempo, así como los oficios artísticos practicados por los maestros de la Manufactura del Valle de Joux. Para continuar su legado, el 2017 los verá renovarse con nuevas funciones relojeras, materiales más sofisticados y una estética que apuesta por la calidad atemporal, en tres modelos excepcionales.
Rendez-Vous Night & Day deslumbra gracias a sus diversos materiales, entre los que destaca una versión de oro amarillo, nuevas funciones y diversos tamaños. Por ejemplo, la versión large, dotada con el Calibre Jaeger-LeCoultre 898D, resulta sumamente poderosa, gracias a su caja de 38,2 mm, tamaño inédito para esta colección. Redondo y fino, permite que las mujeres cambien de brazalete o hebilla para combinarlos con el atuendo que prefieran. Además, su esfera con guilloché finamente granallado de geometría elíptica, le otorga una capacidad de atracción pocas veces vista. Todo coronado por sus 40 horas de reserva de marcha, agujas florales, funciones de horas, minutos y segundos, indicador día/noche, caja de acero u oro rosa de 18 quilates y brazalete de piel de avestruz (en la foto arriaba) o acero.
La versión mediana se declina en oro amarillo. Este material, de reputación eterna, se ofrece por primera vez en un reloj de 34 mm. Muestra un bisel sin engastar, asas sobrias y una hebilla de impecable diseño para que el oro luzca por sí mismo. Para acentuar el brillo del bisel, las esfera plateada luce un elegante guilloché: se trata de una joya más al alcance de las mujeres. También tiene 40 horas de reserva de marcha, agujas florales, indicador día/noche, funciones de horas, minutos y segundos, brazalete de piel de avestruz. Late con el calibre Jaeger-LeCoultre 898A/1.
Otra opción es Rendez-Vous Sonatina Large, cuya apuesta es traer una nueva función al mundo de la relojería femenina: gracias a una pequeña estrella misteriosa y móvil en su mecanismo, es capaz de tintinear la hora próxima de una cita. Según el tiempo elegido, una nota replica delicadamente bajo la presión de un solo golpe de martillo. Sobre su esfera guilloché, las finas agujas de acero azulado son un ejemplo de la más pura tradición relojera. A las 6 h se presenta el indicador día/noche de manera discreta gracias a su forma de arco. Además de la versión de oro rosa, también se propone en oro blanco, dotado con esfera amatista, la cual disimula los rodajes sofisticados de su nuevo movimiento automático, el Calibre Jaeger-LeCoultre 735.
Su caja mide 38.2 mm de diámetro, tiene agujas florales, 40 horas de reserva de marcha, bisel, asas y banda de carrura con engaste de diamantes, brillantes invertidos en las coronas (una para desplazar la estrella y otra para ajustar horas, minutos e indicación día/noche) y brazalete de piel de aligátor con hebilla desplegable.
Para finalizar, aparece el Rendez-Vous Moon, con función de fases lunares, la cual había estado reservada sólo para las piezas de alta joyería de la casa, pero que hoy aparece en este reloj espectacular. De nombre Rendez-Vous Moon Medium, dicho guardatiempo define su personalidad con varios toques de singularidad, entre los que destaca su presentación en acero u oro rosa. En la prolongación de la esfera se desprende una fase de luna sumamente llamativa, lo cual, combinado con su guilloché geométrico, le da un carácter sumamente especial. Con una corrección de solo un día cada 985 años, la función lunar presenta una precisión casi perfecta. En la versión acero, el satélite aparece en un color azul claro centelleante, mientras que en la versión en oro rosa, la luna tienen un acabado intensamente dorado. Late con el Calibre Jaeger-LeCoultre 935A, posee una reserva de marcha de 40 horas, agujas florales, caja de 34 mm y brazaletes de piel de avestruz o aligátor con hebilla desplegable, acero y oro rosa.