Traslado en helicóptero de Ciudad de México a Querétero. Redwings se alía con Breitling para mostrar a México los nuevos relojes de este año en el contexto del ADN de la marca, la aviación. En el hangar que la empresa de aeronaves tiene en Querétaro, las vitrinas mostraban las últimas máquinas horarias de la firma pionera en colocar sus primeros cronógrafos de a bordo en aeronaves en 1931 y que equiparon los aviones de la Royal Air Force durante la II Guerra Mundial. Desde entonces, sus relojes se han distinguido por sus prestaciones en tierra, mar y aire. Elena Hernández, directora de Breitling México y Emilio Watson, director comercial de Breitling para México fueron los anfitriones.
Destacaron piezas como Avenger Hurricane, con su caja de 50 mm de Breitlight, una aleación secreta y patentada de fibras sintéticas de la marca suiza que le permite ser sumamante ligero. Tiene hora militar. Su correa es de caucho y tela de vela ultraresistente. Mide 50 mm y es sumergible 100 metros. Late con el calibre Breitling 12 y tiene funciones de cronógrafo y reserva de marcha de 70 horas.
En esta saga hay un gran protagonista: Avenger II Seawolf Blacksteel que tiene hermeticidad de 3,000 metros, válvula de descomprensión, caja de 45 mm y grandes índices luminiscentes. Late con el calibre Breilting 17 y tiene cristal zafiro grueso. Además es una edición limitada de 1,000 piezas.
En la familia Avenger siguen las propuestas. Avenger Bandit con caja de 42 mm ha conquistado por su ligereza. La caja es de titanio con broche de acero negro. Sobresale el color de su esfera, gris furtivo. Es sumergible 100 metros y su correa es de caucho con tela de vela.
Otro reloj destacable es la nueva versión de su icónico Navitimer con una caja de 46 mm en acero negro, dos contadores en lugar de tres y con calibre Breitling 01 bautizado como Breitling Navitimer 46 Blacksteel. Este reloj lleva la nueva correa de caucho que imita la textura de la llanta de un avión. Su fondo es transparente y tiene regla de cálculo, la misma que se colocó en un modelo Navitimer en 1950.
En el desfile sigue el turno de Colt Chronograph Automatic Blacksteel, con caja de 44 mm de acero negro, hermeticidad de 100 metros, gran punto luminiscente y calibre Breilting 13. La correa es negra Military con caucho.
Para seguir bajo agua está Superocean 44 Special Blacksteel, con bisel de cerámica y caja de acero negro y sumergible a 1,000 metros.
El Cockpit Blacksteel B50 con movimiento de Breitling Superquartz in house, 10 veces más preciso que el cuarzo convencional. Gracias a un sensor miniatura de temperatura es capaz de registar solo variaciones de tiempo de 10-15 segundos por año en lugar de 2-3 minutos, usual en calibres de cuarzo estándar. Un cronógrafo electrónico multifuncional que controla las funciones a través de la corona y dos pulsadores. Su batería dura entre uno y dos meses si se usa de forma constante. Hasta 6 meses si no se usa. La carga se realiza en 10 minutos. Es capaz de memorizar hasta 20 recorridos. Tiene doble huso horario e indicación de nivel de luminiscencia. La caja es de titanio con tratamiento de carbono y correa de caucho.
Entre los lanzamientos, Navitimer 1884, con calibre Breitling 21 con caja de acero negro y bisel de cerámica. Es una edición limitada de 1,884 piezas.
Por último, el Chronoliner Blacksteel, con caja de 46 mm de acero negro y bisel de cerámica. Tiene reserva de marcha de 42 horas y funciones de doble huso horario y cronógrafo. La correa es de caucho y es sumergible 100 metros.