Texto: Nuria Ballesteros
Lo que vamos a contar no es una herejía. El street-style se ha plantado con pie firme en el universo de la moda high-end, con los raperos como sus portavoces naturales. Conocida como Athleisure, esta tendencia se hermana con el nuevo Aquanaut Chronograph de Patek Philippe. Leyeron bien: con Patek Philippe.
De hecho, el sport-chic y el sport-elegant relojeros predijeron el Athleisure. Lo que un modelo como el Aquanaut de Patek Philippe ha simbolizado desde su lanzamiento en 1997 hasta hoy —con la primera versión cronógrafo que además luce detalles naranja y una audaz correa del mismo color—, se refleja en esta corriente fashion que hibrida y conecta mundos antes separados.
El Aquanaut está inspirado en el Nautilus, el ícono sport-elegant de Patek presentado en 1976. Desde el principio fue pensado para atraer a una clientela masculina joven. Una diferencia clave es que el brazalete integrado de acero del Nautilus se reemplazó con una pulsera “tropical” de material composite en el Aquanaut. Un toque tecnológico que sigue refrescando al reloj casual de la firma más prestigiosa de la industria y lo pone en mood trendy.
El término Athleisure fusiona las palabras ‘athletic’ y ‘leisure’, es decir, une lo deportivo con el ocio para crear un estilo relajado pero poderoso. Por su relevancia ya fue incluido en el diccionario Merriam-Webster, que lo define como “ropa casual que puede ponerse tanto para hacer ejercicio como para uso general”.
Lo de “uso general” es tan amplio como suena. Las prendas atléticas aparecen en la calle, las oficinas e incluso en los eventos sociales formales o de etiqueta. Los sneakers y las sudaderas son los ganadores de este cambio de look y de ambiente que tiene como meta la comodidad cotidiana.
“Me suelen preguntar si esta burbuja va a estallar pronto y la respuesta es no”, dijo Matt Powell, de la firma de análisis de consumo NPD, a Forbes. “El Athleisure domina la pasarela (…) Las marcas y los retailers tienen que seguir alimentando esta tendencia”.
Gigantes deportivos como Adidas, Nike y Reebok han aprovechado su expertise para crear colaboraciones con raperos y diseñadores-celebridades, que se venden en miles de dólares y se vuelven objetos de colección. Y los grandes representantes del lujo se han adaptado para, entre otras cosas, recuperar prendas emblemáticas que reviven la nostalgia deportiva de sus colecciones de los 80 y 90.
Nadie quiere perder su rebanada de un pastel que en 2016 alcanzó un valor de 46 mil millones de dólares tan solo en Estados Unidos, según la consultora A.T. Kearney. Se estima que para 2020 el mercado global del Athleisure sea de 350 mil millones de dólares.
Esto implica la renovación de las firmas high-end con el uso del street-style y en respuesta a los gustos de los millennials, que suman un tercio del mercado del lujo.
Los millennials también han encumbrado a las estrellas del hip hop como los líderes de este movimiento. Era natural. Los raperos son la nueva realeza de la música y la moda, y ya se vestían de esta manera antes de que fuera tendencia. Son sus influencers orgánicos.
“En los dos años anteriores, más de una docena de firmas de lujo —entre ellas Louis Vuitton, Saint Laurent y Marc Jacobs— han incluido a artistas de hip-hop en sus campañas publicitarias, mientras que marcas como Versace y JW Anderson han ido más allá al colaborar con artistas como 2 Chainz y A$AP Rocky en productos”, según el sitio especializado Business of Fashion.
En este punto se vuelven a cruzar los caminos del Athleisure y Patek Philippe. La reverenciada manufactura se ha convertido en la casa favorita de los raperos. La plataforma de información musical Genius afirma que Patek Philippe aparece mencionada en una de cada ocho canciones de hip-hop que entraron a las listas de popularidad en los últimos seis meses.
En el estilo del género se suele abreviar el nombre, pero siempre se relaciona a la firma con un estatus de lujo y éxito. El mejor ejemplo es la canción ‘Patek Water’, de Future, uno de los raperos más destacados, en la que se escucha: “Ay, what kinda water is that? It’s Patek water (it’s fleek water)”. Fleek significa extremadamente bueno, atractivo o elegante, tres características en sincronía con la Gran Dama ginebrina.
OMNIPRESENCIA SNEAKER
La sneakerization es la mejor prueba del valor al alza del street-style en la moda de lujo. Las ventas mundiales de los sneakers crecieron 10 por ciento en 2017 hasta 3.5 mil millones de euros, según la consultora Bain & Co.
Las marcas deportivas y las casas high-end compiten con todo para conquistar el mercado. Las colaboraciones con raperos o diseñadores están a la orden del día. Estas ediciones limitadas alcanzan precios que van de 400 a 10 mil dólares, como es el caso de los Chanel X Pharrell Hu Race Trail, creados con Adidas y Pharrell Williams, o de los Nike Air Jordan 3 Retro DJ Khaled Grateful, hechos con el rapero DJ Khaled (gran fan de Patek).
Otro ejemplo es el del diseñador Demna Gvasalia, quien ha realizado ediciones especiales para tres marcas: Vetements, Balenciaga y Reebok.
LA NUEVA REALEZA
Los raperos dominan la moda igual que dominan la música. Varias firmas han sustituido en sus campañas a las celebridades de Hollywood por músicos de hip-hop como Future, Kanye West, Pharrell Williams o DJ Khaled, todos ellos admiradores de firmas relojeras como Patek Philippe. Este género también ha desbancado al rock como el más popular en Estados Unidos. Su estilo, deportivo y práctico, anticipó por muchos años la llegada del Athleisure, y ahora se ha incrustado en el corazón de la industria del lujo.
“Los raperos como Kanye tienen un ángulo totalmente distinto y una mentalidad más abierta. Su fortaleza es que entienden cómo comunicarse y desencadenar una reacción de la audiencia joven, algo que la moda no entiende ni de lejos tan bien”, dijo David Fischer, fundador y CEO del sitio Highsnobiety, a Business of Fashion.
“Es importante que esta generación y la siguiente vean a personas que lucen como ellos o que los inspiran, porque la moda no es solo para la élite”, dijo A$AP Rocky al mismo medio.
