Black Bay es la colección que mayor crecimiento en Tudor. Y he aquí otro ejemplo de ello. Un estilo vintage que va más allá de los clásicos. La casa lanza al mercado un buzo que se transmuta en cronógrafo y se viste bicolor. Black Bay Chrono S&G (Steel & Gold). Es el primer cronógrafo de manufactura de Tudor con nuevo estilo.
Tradición acuática a la que se suma la velocidad del circuito, una síntesis híbrida del mar y la tierra. Agujas “snowflake”, contadores color champagne y bisel fijo con escala taquimétrica en oro amarillo con aluminio negro anodizado.
Black Bay Chrono S&G presenta también refuerzo atornillados en la corona y pulsadores. Una pieza con estética fiel a los años 60, pero con un corazón completamente al día. Porta el movimiento automático de manufactura MT5813 con función cronógrafo y certificación COSC. Este cuenta con espiral de silicio antimagnético y una reserva de marcha de 70 horas.
Es un calibre con base de crono Breitling 01 desarrollado por Tudor y con acabados específicos. Este nuevo Black Bay, también presenta la opción de una correa de cuero tipo “bund” en color marrón envejecido.
“La línea Black Bay se está agrandando mucho, es un reloj que representa la nueva identidad de nuestra marca”, aseguraba a Tiempo de Relojes Ander Ugarte, el diseñador de la firma. “Tiene mucho interés comercialmente. Está funcionando muy bien y nosotros la ampliamos. Ahora jugamos con las complicaciones de los mecanismos”.
Una pieza deportiva que realmente permite jugar con distintas funciones y combinar materiales. Este año fue también novedad su Black Bay P01, un prototipo que se mantuvo en secreto en los anales de Tudor y se recuperó para su lanzamiento.