Urwerk combate el COVID-19 en la Guerra de las Galaxias

Este Urwerk UR-100 en oro llamado C-3PO es una edición limitada de 25 ejemplares. Pero la pieza número 1 fue subastada con fines solidarios hace diez días. Alcanzó 96,500 francos suizos tras el golpe del martillo. Bautizada “Fight C-19” ha sido una potente arma contra el virus que nos azota. La cifra se donará por Urwerk a Liverpool School of Tropical Medicine (LSTM) y sus proyectos con diferentes instituciones para la ayuda pública en UK y a nivel mundial contra el COVID-19. Urwerk, además, ha comprado y donado equipo de protección a la Cruz Roja para la población más vulnerable en Suiza. Un verdadero combate en esta Guerra de las Galaxias.

El módulo de las horas satelitales se ha presentado en nueva versión de oro. Y su apodo C-3PO lo adopta del androide de la Guerra de las Galaxias. El juego de la luz, el tiempo y el espacio soñado. “Desde los inicios de Urwerk, la ciencia ficción es fuente inagotable de inspiración” asegura Martin Frei, cofundador de la casa. “Desde niño, soy todo un “geek”. Mi padre era ingeniero y tuvo la oportunidad de trabajar en proyectos tan delirantes como el Rover lunar Apolo. Era mi héroe, y me ha transmitido el amor por el cosmos y sus sueños”.

Esta versión llamada C-3PO viene a ser el tercer episodio de la saga intergaláctica de la colección 100 de la firma independiente.

El UR-100 está tallado en un bloque de oro amarillo macizo (41 x 49,7 mm) que recuerda al color del androide más parlanchín y torpe de la historia del cine. Encima de la caja, domina la esférica lectura de las horas bajo el domo de zafiro. El diseño modular curvo monta el calibre UR 12.01. Un mecanismo que parece creado para el espacio interestelar, como el juego astrofísico de las revoluciones de los satélites en perfecta cronometría.

Las horas desfilan delante de los minutos con la ayuda de la flecha roja. Cuando ha acabado de indicar el paso del tiempo, su aguja roja desaparece para resurgir en contador de kilómetros. A las nueve, dentro de una diminuta rendija, indica los 555 kilómetros que el planeta Tierra recorre en veinte minutos en el plano del ecuador. A las tres, el calibre presenta la velocidad de revolución de la Tierra alrededor del sol, o sea 35.740 kilómetros cada veinte minutos. El sistema automático Windfänger de la firma alimenta el movimiento.

 

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