Los árboles son un elemento vital en nuestras ciudades. Sirven de filtro para mitigar el efecto isla de calor, absorben el carbono y oxigenan el aire. Además, son muy eficientes para protegernos de los elementos: un metro cuadrado de uno de nuestros bosques es capaz de absorber 150 litros de agua durante una tormenta. Pero lo más importante es que nos permiten recuperar el contacto con la naturaleza. ¿Sabía que el canto de los pájaros es un estupendo instrumento de relajación para las personas? Pero solo cantan si se encuentran en un entorno seguro y nosotros se lo proporcionamos con nuestros bosques.
SUGi es una plataforma global dedicada al cultivo de bosques urbanos con especies autóctonas, diversas y sostenibles. Nosotros invitamos a la gente a participar en los diferentes proyectos de reforestación que tenemos en todo el mundo. Los hemos diseñado de un modo completamente transparente en el que todas las personas vean el progreso de los bosques en tiempo real. A través de nuestra App pueden incluso elegir el proyecto en el que quieren invertir su donación. Siempre ponemos a disposición de todas las personas la información actualizada de cada proyecto: estado del cultivo, números de árboles plantados y las especies utilizadas.
Método Miyawaki
Siempre había querido trabajar en un proyecto de reforestación que fuera realmente útil para el entorno en el que vivimos, pero solo encontraba conceptos desfasados basados en monocultivos. Un día vi la luz mientras leía acerca del método Miyawaki y entendí que era la solución perfecta para lo que estaba buscando. Los bosques de Miyawaki se basan siempre en plantas locales, incluyen cien veces más especies diversas que los bosques convencionales, son treinta veces más densos y crecen en diez años lo que otros tardan en un siglo. Desde el principio tuve claro que eran la solución que estaba buscando para SUGi.
Nuestras reglas son muy sencillas: el proyecto tiene que estar dirigido por un experto en la técnica Miyawaki. Lo ideal es que el bosque se levante en un entorno urbano, como una escuela o un espacio que suponga un oasis natural dentro de la ciudad. Pero lo más importante es la historia que hay detrás de cada bosque y el modo en el que las personas se relacionan con él: quién quiere levantarlo, las razones para hacerlo y los beneficios que aporta a la comunidad. En la actualidad tenemos más de 90 proyectos en nuestro portafolio. Ya hemos creado 75 bosques SUGi en doce países diferentes.
Ayuda de Breitling
La colaboración con Breitling es la más ambiciosa de las emprendidas hasta ahora por SUGi el pasado año. Ha hecho posible la creación de cuatro bosques: uno en Australia, otro en Camerún y los dos restantes en las tierras del pueblo Yakama, aborigen del Estado de Washington. La participación se extenderá este año con tres nuevos bosques y un proyecto conjunto de cuatro películas de corta duración. Por otra parte, Breitling ha querido implicar a sus clientes en este proyecto de reforestación con una curiosa propuesta: proponer una donación voluntaria de 20 dólares a todos los compradores de sus relojes que opten por el viejo estuche en lugar del nuevo embalaje ecológico.
