Galet Micro-Rotor es la nueva propuesta de Laurent Ferrier, una edición limitada ultraplana de platino de solo 18 piezas. Lleva esmalte Grand Feu en la carátula.
El reloj es un “motor” de alto rendimiento, encerrado en una carrocería preciosa que exalta su elegancia. Dentro de esta caja de platino anida una mezcla concentrada de innovaciones relojeras desarrolladas, acabadas y montadas en Laurent Ferrier. Este calibre de cuerda automática con un micro–rotor descentrado deriva de un desarrollo exclusivo inspirado en el escape de Abraham-Louis Breguet. El resultado muestra el acierto de combinar esta herencia relojera con una construcción moderna con materiales de última generación.
La construcción armoniosa y las prestaciones técnicas del Galet Micro Rotor (FBN Calibre 229.01) se derivan de un enfoque global previsto para cada una de las partes de movimiento, siendo el objetivo de optimizar la gestión de la energía y mejorar la facilidad de uso gracias a la mayor eficiencia de la cuerda automática. Inventada en el siglo XVIII, la carga automática se aprovecha de los movimientos del brazo del usuario para mandar energía al barrilete y así almacenar la necesaria para hacer funcionar el mecanismo.
Laurent Ferrier trató de alcanzar un equilibrio funcional entre el espesor limitado de un movimiento automático y la necesidad de alcanzar un alto grado de eficiencia del barrilete. Lograr esto implicaba la búsqueda de un sistema que garantice la cuerda perfecta para compensar la menor inercia de una pequeña masa oscilante.
Por tanto, Laurent Ferrier optó por desarrollar un nuevo doble escape de silicio de impulso directo al balance. Inspirado en el escape inventado por Abraham Louis Breguet en 1789, este mecanismo transmite dos impulsos por oscilación. La fuerza mecánica requerida para enrollar el muelle se reduce y el movimiento de cuerda es a su vez optimizado. Este mecanismo de cuerda automática es un micro-rotor unidireccional con trinquete. El micro–rotor está provisto de una masa oscilante de oro decorada con guilloché, que está descentrada y ubicada en la platina entre dos puentes, fijos sobre un eje entre dos rubíes. Esto asegura la máxima estabilidad en comparación con un micro-rotor convencional, reduciendo así el espesor movimiento y asegura una visión más clara de la construcción.
La forma curvada de la caja recuerda el diseño de los relojes del siglo XIX. El reloj, además, está equipado con una corona en forma de bola que facilita su uso.
Su perfecta legibilidad está garantizada por la disposición gráfica de los ocho índices horarios y los tres números romanos (XII, III y IX) pintados de negro. El círculo para minutos es tipo ferrocarril y el pequeño subdial para segundos está pintado de azul.