Una regla no escrita de la relojería nos dice que, ante la duda, presenta un deportivo. A todos los aficionados les gustan los relojes clásicos, pero la mayoría opta por el segmento sport. Y es lógico: son más versátiles, modernos, con mejores condiciones técnicas y, si el creativo es bueno, igual o más elegantes. Laurent Ferrier es una firma de corte clásico, en eso estamos de acuerdo, pero sus éxitos más recientes los ha labrado en el segmento de los deportivos.
El año pasado presentó su Sport Auto Blue, reloj inspirado en el Grand Sport de 2019, aunque con dimensiones y mecanismo más asequible, lo que no está nada mal para una firma tan exclusiva. El Sport Auto fue todo un éxito y Laurent Ferrier repite este año modelo, con el interés añadido de su nueva carátula. Aquí encontramos ese tono verde-azulado que ha arrasado este año entre las firmas y que se perfila como el acabado de la temporada. Y el resultado no ha podido ser más positivo.
En las 24 Horas de Le Mans
Como decimos, el Sport Auto 40 sigue una tendencia del mercado, aunque la firma nos recuerda que su elección está perfectamente legitimada. Para aquellos que no lo sepan, Laurent Ferrier, además de un soberbio relojero, ha sido un experimentado piloto de carreras. El logro más destacado de su carrera deportiva fue el tercer puesto logrado en las 24 Horas de Le Mans en 1979 a los mandos de un Porsche 935 y formando equipo con François Trisconi y François Servanin. Este último, por cierto, se uniría años más tarde a su amigo Laurent en la creación de la manufactura homónima.
Aquel Porsche 935 pilotado por Ferrier, Trisconi y Servanin lucía en su carrocería el mismo color verde que ahora observamos en la carátula del flamante Sport Auto 40. El vínculo con este origen del reloj se confirma con la presencia del número 40 en el contador de segundos de la carátula. Es el mismo número que lució el citado Porsche en la edición de Le Mans de 1979.
REPETICIÓN DEL ÉXITO
Más allá de este nuevo diseño de carátula, el Sport Auto 40 mantiene las mismas características que el Sport Auto Blue del año pasado. Su diseño deportivo y aerodinámico parte del mencionado Grand Sport, aunque un considerablemente más pequeño. Tiene un diámetro de 41.5 milímetros (y no los 40 que luce en su nombre), con un brazalete perfectamente integrado en las formas de la caja que se adapta con naturalidad a la muñeca. Tanto la caja como el brazalete está fabricados en titanio de grado 5. Esta decisión hace que el Sport Auto sea un reloj muy agradable de llevar, como buen modelo deportivo.
Tampoco hay cambios en el movimiento. El reloj lleva un calibre LF720.01, desarrollado y producido por la propia casa. El mecanismo destaca por su carga automática mediante micro-rotor y reserva de marcha de 72 horas. El calibre LF720.01 monta un escape suizo, más resistente que el escape natural habitualmente usado en los relojes de Laurent Ferrier. El escape suizo es más resistente y sencillo de realizar que el escape natural. Una decisión más que confirma al Sport Auto como la alternativa perfecta para entrar en el universo de Laurent Ferrier.
FICHA TÉCNICA
LAURENT FERRIER SPORT AUTO 40
