El nuevo TAG Heuer Connected Modular 45 incluye GPS, es resistente al agua a 50 m, permite customizaciones y es intercambiable con un tourbillon.
En 2015, TAG Heuer presentó en Nueva York el primer reloj Connected suizo en un gesto oportuno para dar respuesta al preocupante fenómeno de los smartwatches. Hoy, junto a los valles encrespados del Rüttli Meadow, la firma ha revelado la segunda generación de su reloj electrónico con un mensaje destinado a ensalzar el orgullo Swiss Made que vive sus horas más bajas desde la crisis del cuarzo de los años 70. Rütli, que significa pequeña pradera en alemán, está considerada como un monumento nacional.
En 1291, encima del lago de Lucerna, los representantes de los cantones primitivos prestaron juramento para sellar su alianza y constituir la Comunidad Helvética. Con el paso del tiempo, la pradera de Rütli se ha convertido en un santuario nacional. Aquí, Suiza celebra cada primero de agosto la fiesta nacional oficial. Al reunir a sus socios de Silicon Valley y a la prensa mundial aquí, Jean-Claude Biver, Presidente del Área Relojera de LVMH, buscaba dar un mensaje ideológico que conectara con los valores históricos que no se puede permitir una firma como Apple.
“Hace dos años no teníamos ni un reloj conectado en Suiza y hoy presentamos el mejor del mercado y está diseñado, desarrollado y ensamblado totalmente en Suiza”, dijo un Biver exultante. “Se trata de un reloj que encarna los códigos del lujo del mañana y que no solo te permite conectarte con el futuro, sino también con la eternidad gracias a su diseño modular inteligente”. La última tecnología de Silicon Valley y la aunteticidad de una marca con más de 150 años como creador de relojes”. La presentación se llevó a cabo el mismo día en Suiza y California. Junto a los Alpes, Jean-Claude Biver estuvo acompañado por Josh Walden, vicepresidente sénior y director general del New Technology Group de Intel, y David Singleton, vicepresidente de Android Engineering en Google.
En San Francisco, la presentación, celebrada unas horas antes en el St Francis Yacht Club, tuvo a Brian Krzanich, CEO de Intel, Guy Semon, director general de TAG Heuer, y Tom Foldesi, vicepresidente de tecnología y productos conectados de la firma relojera como protagonistas.
El nuevo Connected Modular 45 (la cifra es el diámetro de la caja) incorpora todas las soluciones que demandaba la primera versión desarrollada con sus mismos aliados Intel y Google: un sistema Android Wear 2.0 y la nueva aplicación Companion de la casa mejoran la experiencia de software y le mantienen conectado con las personas y la información.
También incorpora un GPS para monitorear los viajes y las actividades deportivas sin depender de un teléfono celular. El reloj es, por primera vez en un smart, resistente al agua hasta 50 metros, trae un sensor NFC con Android Pay para realizar pagos, una batería de litio de un día de autonomía y una pantalla con resolución mejorada.
Pero la verdadera astucia del nuevo orgullo electrónico helvético frente a sus más directos competidores es la capacidad del objeto de modularse a gusto del consumidor en cientos de variantes posibles permutando materiales como la cerámica, el titanio, el oro rosa, el acero, el aluminio, los diamantes, el caucho, la piel, una amplia paleta de vivos colores en los brazaletes y biseles y una selección de carátulas que pueden personalizarse sin restricciones.
Algunas de estas esferas están inspiradas en piezas históricas con color blanco, negro, gris claro, gris antracita, marrón chocolate, azul marino o dorado, con acabado sol, esfera esqueletada, 3 agujas, GMT, cronógrafo con 1, 2 o 3 contadores, además de ventanilla de día y fecha.
El configurador de esferas TAG Heuer Studio también brinda a los clientes la posibilidad de crear sus propios diseños incluso con apariencia de detalles Super-LumiNova. “La posibilidad de customización es lo que le hace ser un verdadero reloj de prestigio”, dijo Jean-Claude Biver en un día que recordó a otras fechas históricas como su relanzamiento de Blancpain, a principios de los años 80, cuando el joven Biver se comprometía a no hacer nunca un modelo de cuarzo. O la respuesta fiable, simple y con diseño en 1981 del reloj Swatch de Nicolas G. Hayek a los uniformados relojes de cuarzo japoneses.
El Connected Modular 45 ha sido diseñado, desarrollado y montado en la Manufactura TAG Heuer de La Chaux-de-Fonds con la misma técnica y acabados que sus relojes mecánicos. Pero TAG ha llevado el concepto modulable más allá. El reloj se desmonta por completo, incluidos los cuernos de la caja por separado. El cuerpo central puede ser intercambiable con un cronógrafo automático TAG Heuer 02T Tourbillon, con certificado cronométrico COSC, para argumentar que el pasado puede estar ligado con el futuro sin que haya que generar otra traumática fractura en el mundo de las horas.
Biver anunció que desde las 12 horas de hoy y hasta el 29 de marzo, salían a subasta los primeros mil estuches en eBay que incluyen el Tourbillon y el Connected Modular 45, lo mejor de los dos mundos, a un precio de 17,000 dólares. La recaudación irá destinada a fines benéficos. A partir de hoy la segunda generación del Connected estará también de forma separada a la venta en las boutiques propias, a través de distribuidores seleccionados o en la tienda virtual de la marca.
TAG Heuer adelantó que presentará muy pronto una nueva experiencia de gestión del tiempo en exclusiva mundial: la aplicación Companion, que entienden la planificación de los días y muestra reuniones, tareas, llamadas, planes, viajes… con una memoria de 4 GB y una pila de litio de última generación que proporciona más de un día completo de marcha. El Connected 2 cuenta también con un pequeño micrófono hermético que permite al usuario comunicarse con él usando Google Assistant.
Una vez apagado, el reloj sigue calculando, mostrando e intercambiando información mientras tenga conexión Wi-Fi. Las aplicaciones instaladas en el reloj (música, contador, alarma, podómetro, etc.) siguen estando activas incluso cuando no hay ninguna conexión disponible. La firma anunció igualmente que lanzará en octubre una versión Connected para mujer de 39 mm.
El TAG Heuer Connected Modular 45 sale a la venta a un precio a partir de 1650 dólares.
Texto: Carlos Alonso / Brunnen, Suiza