La firma estadounidense lleva a sus límites el ideal de la máxima precisión. Materiales enriquecidos y diseño futurista para un crono de ocho manecillas. Y un corazón que refleja el dominio del cuarzo.
Precisión extrema
Se cumplen diez años del lanzamiento de Precisionist y Bulova lo celebra con una edición especial para disfrutar esta innovadora tecnología capaz de medir tiempos con una precisión de una milésima de segundo. Una espectacular presentación que adereza la deportividad de la colección con detalles como el acabado adamascado de su bisel.
Presentada en la edición 2010 de Baselworld, la tecnología Precisionist devolvió a Bulova el carácter innovador que le caracterizó en el pasado. Precisionist surge de una colaboración con Citizen, el gigante japonés al cual pertenece Bulova en la actualidad y cuyo dominio de la tecnología del cuarzo hizo posible su desarrollo.
A diferencia de los movimientos tradicionales de cuarzo, Precisionist incorpora un cristal de tres puntas (lo habitual son dos) construido en una sola pieza. Esta innovación permite a los movimientos Precisionist multiplicar por ocho la frecuencia de funcionamiento (262 kilohercios) y conseguir una desviación media de 10 segundos por año, o llegar a ofrecer una precisión de una milésima de segundo en sus cronógrafos.
Precisionist es solo una parte de la inmensa oferta que ofrece actualmente Bulova en su catálogo. La firma estadounidense sigue fiel a su filosofía de ofrecer una relojería popular y precios accesibles para hombre y mujer. Un catálogo de relojes que se sustentan en el dominio del cuarzo.