De todos los vestigios y creaciones que la mítica cultura egipcia legó a la humanidad, las majestuosas pirámides son, sin duda alguna, las más importantes. Su construcción maravilla por la complejidad requerida (imagina montar tan impresionantes construcciones sin una sola de las herramientas actuales), así como por su belleza hipnótica: han atestiguado con paciencia infinita el paso del tiempo.
La firma ofrece un guardatiempo bastante atractivo visualmente, gracias a su esfera esqueletada, técnica de construcción que Arnold & Son ha perfeccionado a lo largo de su historia hasta dominarla por completo.
La parte mecánica del Time Pyramid Black Edition está inspirada por los reguladores construidos a mediados del siglo XIX, sobre todo los creados por John Arnold, fundador de la compañía. Estos relojes eran tanto ornamentales como revolucionarios, pues usaban el esqueletado para dejar al descubierto todo el mecanismo, al tiempo que presumían un efecto tridimensional que se replica en la nueva pieza.
La caja está construida con acero inoxidable y tratamiento DLC negro, cuenta con 44.6 mm de diámetro, cristal de zafiro al frente y reverso, resistencia al agua de 30 metros y correa de piel aligátor negra cosida a mano.