Purnell es una de las mejores noticias que han llegado a la Alta Relojería en los últimos años. Aunque nos quedamos cortos si hablamos únicamente de Alta Relojería. Su Purnell Escape II es pura ultracomplicación. Un concepto de trabajo que busca de manera consciente la exclusividad incluso en un espacio tan exigente de desarrollar como es la relojería mecánica. Si una complicación como el tourbillon está pensada para unos pocos coleccionistas, ¿cuántos afortunados podrán disfrutar de unas piezas como estas? Esta es la estrategia de Purnell: alcanzar metas no ya inalcanzables para otras marcas, sino ni siquiera imaginadas.
Claro que un proyecto de esta ambición necesita una mente acorde con la hazaña. Purnell lo tiene. Se trata de Eric Coudray, uno de los mejores maestros relojeros de la actualidad. Coudray fue el responsable del Gyrotourbillon de Jaeger-LeCoultre, el primer reloj (junto a Franck Muller) en incorporar una nueva dimensión al tourbillon. Coudray ha encontrado en Purnell el socio perfecto para desarrollar este concepto a un nivel superior. Para ello creó en 2017 el Spherion, un tourbillon de triple eje incrustado dentro de una pequeña esfera giratorio, interpretación que el propio Coudray ha hecho del antiguo escape desarrollado en el siglo XIX por el relojero estadounidense Abert Potter.
Tourbillon de triple giro
El siguiente paso ha consistido en doblar la apuesta con el Purnell Escape II con la inclusión en el movimiento del reloj de dos Spherion. Cada uno de los tourbillones completa de manera simultánea tres giros en otros tantos ejes de la jaula, uno cada 8 segundos, el intermedio cada 16 segundos y el exterior cada medio minuto. La suma de todos los giros convierte al Spherion en el tourbillon más rápido del mundo. Se cumple así el viejo sueño de Breguet de evitar la influencia de la gravedad en el escape del mecanismo: a esta velocidad de giro es imposible que esto ocurra.
Dada la complejidad del proyecto, cada referencia de Purnell es única. La firma presenta de manera periódica algunas piezas. La última de ellas es el Purnell Escape II Forged Carbon, un reloj realizado en carbono forjado y que trae la curiosa novedad estética de la realización de las jaulas de tourbillon en rosa neón, mismo color elegido para los índices de la carátula. De este reloj se van a realizar únicamente tres unidades para todo el mundo.
El factor rosa
La elección del rosa puede chocar en un reloj en principio pensado para el público masculino. En realidad, la misma heterodoxia que Purnell presenta en la interpretación del clásico tourbillon se traslada al concepto del género del reloj. No solo hablamos de colores “femeninos”, sino de una sorprendente adaptación de los códigos de la joyería mediante el uso de piedras preciosas. Lo vemos en el también novedoso Escape II Black DLC Titanium Rose Gold, reloj cuyas jaulas del movimiento están engastadas con más de trescientos diamantes en talla brillante, una primicia técnica de la cual Purnell tiene la exclusividad mundial. Si estos modelos no les satisfacen al cliente, tiene la opción de acordar con la firma una personalización del reloj, incluyendo el tipo de piedra que quiere para el engaste de su movimiento.
En cualquier caso, tampoco podemos interpretar estas dos novedades como productos exclusivamente pensados para el público femenino. La razón es muy simple: la caja del Escape II Black DLC Titanium Rose Gold es de 44 milímetros, mientras el modelo en carbono forjado se va hasta los 48. Se hace complicado imaginar una muñeca femenina capaz de sostener semejantes máquinas. Entendamos mejor estas piezas como una ruptura de los códigos preestablecidos de género. Estas piezas están pensadas para aquellas personas que quieran experimentar la relojería más arrebatadora, con independencia de si son hombres o mujeres.
FICHA TÉCNICA
PURNELL II FORGED CARBON NEON PINK
FICHA TÉCNICA
ESCAPE II BLACK DLC TITANIUM ROSE GOLD