Pues sí llegó el momento. Y los rumores del pasado año en redes sociales y los mentideros de relojería sobre el posible uso del titanio en Rolex se han convertido en certeza total. La firma que ha hecho del Oystersteel un estandarte invencible, lanza una espectacular versión en titanio de su ilustre lobo de mar. Rolex presenta la nueva versión de su Oyster Perpetual Yacht-Master, por primera vez, en titanio RLX —la aleación especial de Rolex más robusta y ligera del titanio grado 5—. Singladura en alta mar con el nuevo capitán de Rolex.
Espíritu náutico
Tras la primera pieza en titanio de la historia de la firma, lo más interesante es haber trabajado en titanio la caja Oyster, concebida como una pieza monobloque infranqueable. Esta nueva versión se distingue por un acabado satinado muy técnico. Muy marcado, el satinado se extiende a los flancos de la carrura, al canto de los eslabones del brazalete y a los laterales de la tapa del cierre. Además, las aristas superiores (anteriormente achaflanadas) de las asas de la carrura son brillantes, mientras que los protectores de la corona están pulidos. La corona y el fondo del Yach-Master son enroscados y también ambos componentes están fabricados en el titanio RLX de la firma de Ginebra.
Perfecta solidez
Este Rolex Yacht-Master 42 de titanio RLX se mantiene fiel a la estética del modelo presentado en 2019. Lanzado originalmente en 1992, el Yacht-Master fue especialmente diseñado para navegantes y capitanes. Simboliza la unión entre Rolex y el mundo de la vela desde los años 1950. Luce una esfera de color negro intenso con acabado satinado fino. El bisel giratorio bidireccional porta un disco Cerachrom de cerámica negra mate con graduaciones y números en relieve y pulidos. Su brazalete Oyster, fabricado igualmente en titanio RLX con inserciones de cerámica, dispone del cómodo sistema de extensión rápida Easylink. Una pieza sólida de 42 mm, con corona Triplock de triple cierre y cristal de zafiro con lente Cyclops, que garantiza hermeticidad a 100 metros.
Calibre 3235 de manufactura
El calibre 3235 de manufactura cuenta con toda la alta tecnología ya reconocible por los seguidores de la firma: espiral Parachrom azul paramagnética, escape Chronergy y áncora y rueda de níquel-fósforo también con propiedades paramagnéticas. Presenta una gran estabilidad frente a las variaciones de temperatura, así como una alta resistencia a los golpes. Su espiral con la curva final Rolex garantiza la regularidad de la marcha en todas las posiciones. Y el oscilador está montado sobre amortiguadores de golpes Paraflex de alto rendimiento, desarrollados por la marca y patentados, que lo robustecen frente a los golpes. En cuanto a la masa oscilante, ahora está dotada de un rodamiento de bolas optimizado. Un mecanismo de cuerda automática alimentado con rotor Perpetual. Gracias a la arquitectura de su barrilete y al rendimiento superior de su escape, posee una reserva de marcha de aproximadamente 70 horas.
Cronómetro Superlativo para la vela
El calibre 3235 fue uno de los movimientos de última generación de la casa suiza. Entre otras piezas, se encuentran el Submariner Date y Sea-Dweller con este calibre. Como todos los Rolex, cuenta con la certificación de Cronómetro Superlativo redefinida en 2015. Su sello verde aporta una garantía internacional de cinco años. Estética náutica refinada que responde con el mismo alto rendimiento a las exigencias de la vela deportiva.
FICHA TÉCNICA
Rolex Oyster Perpetual Yacht-Master 42