Comienza el año y Corum presenta 3 ediciones limitadas de su famosa línea Bubble con el nuevo Big Bubble Stop, reloj que no sólo amplía dicha colección, sino que se plantea como una declaración de principios: la visión creativa de los seguidores resulta vital para el proceso de diseño de la firma.
Y es que este guardatiempo es resultado del primer desafío participativo que organizó la marca hace ocho meses, bajo el nombre Customize Your Bubble, donde los adeptos aportaron diversos diseños a los relojes insignia de Corum. “Esta experiencia nos trajo muchas sorpresas. Algunas marcas se limitan a dialogar con los clientes, pero nosotros integramos directamente a nuestros fans. Los resultados superaron nuestras expectativas. El Big Bubble Stop es el mejor ejemplo de esto”, declara Davide Traxler, CEO de Corum.
Fue tal el éxito, que en lugar de la pieza única que estaba prevista, el reloj será lanzado, como ya se dijo, en 3 modelos, cada uno limitado a 88 piezas. El Big Bubble Stop está basado en el diseño propuesto por Jérôme Barbier, amante de la marca, quien retoma las señales de tráfico suizas, consideradas las mejores del mundo, para dar vida a la esfera. Su superficie alveolada recuerda las primeras ediciones limitadas lanzadas en 2015, que hoy ya no están disponibles. El brazalete está hecho con tecno pointe, material técnico que le confiere suma resistencia.
Las 3 piezas se presentan en versiones con caja de titanio de 42, 47 y 52 mm, domo de cristal de zafiro antirreflejante, fondo de cristal de zafiro que permite apreciar el movimiento CO403 (capaz de garantizar una reserva de marcha de 65 horas), corona de titanio grado 5 y estanqueidad de 100 metros.