Es una transformación completamente radical porque, justamente, va a las raíces y el origen de aquel histórico cronógrafo Breitling Superocean “Slow Motion” de los años 60 y 70. Un cronógrafo con un solo contador para los minutos, de ahí su “lento” correr —una hora para recorrer el subcontador completo—. Pero se trata de mucho más que un simple “revival scuba diving”. Breitling se lleva su histórico diver a surfear, nadar y disfrutar en la playa. Interesante la amplitud de una colección colorida y es muy atractiva la pieza de bronce. El mar como estilo de vida.
Original interpretación
“Hay una cierta similitud en el aspecto de la mayoría de los relojes de buceo, pero el Slow Motion siempre se destacó entre la multitud. Estamos muy contentos de presentar nuestra versión moderna de este clásico, el nuevo Superocean”, ha declarado Georges Kern, CEO de Breitling. La colección se presentó a los medios e invitados en el festival de surf y motocicletas Wheels & Waves en Biarritz. El evento continuó con un día de actividades en el mar y visitas sorpresa de diferentes personalidades europeas del surf y la pantalla. Estuvieron presentes los surfistas Andrew Cotton, Jérémy Florès y Natxo González, además del actor francés Guillaume Canet y el actor español Álvaro Morte, miembro del squad de Breitling.
Sabemos que el control del tiempo es vital debajo del agua. Superocean “Slow Motion”, en el origen, se trataba de un reloj herramienta. Y sus características estéticas obedecían a desarrollos técnicos específicamente funcionales para el buceo. Breitling introdujo un anillo de marcación de alto contraste en la escala de minutos para una mejor visualización. Se sobredimensionaron los índices luminiscentes, mucho más gruesos, para facilitar la lectura. Y aquella pieza histórica llegó a eliminar el segundero central del movimiento, ya que no contaba realmente para el buzo debajo del agua.
Pieza histórica Slow Motion en el centro
Revisionismo Kern
Tras el relanzamiento del Navitimer este año, la firma liderada por Georges Kern vuelve con su filosofía revisionista para adaptar la pieza a un espíritu más contemporáneo con esos guiños expresivos de aquel reloj. El distintivo minutero cuadrado del “Slow Motion” se mantiene. También regresa la escala de minutos de alto contraste. Los amantes de las piezas históricas recordarán “el punto”. Era una ventana circular a las 6 h que mostraba diferentes colores para que se pudiera ver si el cronógrafo de los minutos estaba activado, pausado o apagado. En el nuevo Superocean, ese círculo se transforma en la punta de la nueva manecilla del segundero.
Este nuevo Superocean se lanza en cuatro tamaños (46, 44, 42 y 36 mm) con coloridas esferas. Apuesta por versiones en acero, acero dorado y una interesante declinación en bronce. Las manecillas anchas y los índices llegan recubiertos con Super-LumiNova®. El nuevo bisel presenta incrustaciones de cerámica. Es un bisel unidireccional en la mayoría de los tamaños, pero presenta movimiento bidireccional con bloqueo patentado en el de 46 mm por seguridad. La pieza monta el calibre 17 automático de Breitling con una reserva de marcha de 38 horas. Es hermética a 300 metros. Dos opciones de correa se pueden usar para disfrutar en el mar. Una correa de caucho deportiva y un nuevo brazalete de metal, diseñado con tres eslabones, que cuenta con un cierre desplegable que permite ajustes de hasta 15 mm.