El titanio se está imponiendo como una de las tendencias de la temporada. Lo hace de un modo muy concreto, acompañado de un acabado monocromo que realza la belleza metálica de esta joven aleación, ya que su origen data de inicios del siglo XX, nada comparado a los siglos que el hombre lleva trabajando otras aleaciones como el bronce o el acero. El último ejemplo que nos ha llegado de este resurgir del titanio nos lo trae Girard-Perregaux, que lo incluye por primera vez en el Laureato clásico.
Algún aficionado se extrañará de esta información. ¿Es que no existía ya el Laureato con este material? Sí que existía, pero en otras variaciones de línea de esta popular colección. A lo largo de los años el Laureato ha conocido diferentes declinaciones como EVO o Absolute, ambas de carácter deportivo y perfectas para disfrutar de las características del titanio. Con este apoyo dentro del catálogo, el Classic Laureato tradicionalmente había quedado limitado a versiones más clásicas en oro y acero. Esta tendencia cambió recientemente con la llegada de las versiones en cerámica y cerámica verde, esta última vinculada a su acuerdo con la escudería Aston Martin de Fórmula 1. Pero nos faltaba una versión en titanio. Y esta ausencia se resuelve ahora con la llegada del Laureato Cronógrafo Ti49.
Un Ti49 de Ti5
Una aclaración: el nombre del Ti49 no hace referencia a una nueva variante del titanio. Girard-Perregaux ha empleado en esta ocasión el titanio de grado 5, la variedad más popular en relojería, elaborada con un 90% de titanio puro, un 6% de aluminio, un 4% de vanadio y mínimos suplementos de hierro y oxígeno. Que la firma haya escogido el nombre de Ti49 responde a los años que lleva el Laureato en el mercado, lo que nos recuerda que el año que viene este reloj cumple medio siglo de existencia. Dada la importancia que el Laureato tiene hoy en día en el mercado, seguro que Girard-Perregaux prepara algo muy especial para el año que viene. A la espera de que esto ocurra, el Laureato Cronógrafo Ti49 nos confirma la vigencia de este carismático reloj, ya convertido en uno de los iconos deportivos de la relojería moderna.
El acabado monocromático refuerza el poder visual de la aleación, ligeramente más oscura que el acero, y “esculpe” las reconocidas formas de la caja Laureato. Es un verdadero placer para la vista disfrutar del contraste de superficies que vemos en los diferentes elementos de la caja. La carrura en forma tonel trabajada con un cepillado horizontal, mientras el bisel lo tiene en circular. Después aparecen los pulidos de la base del bisel, los cantos de la caja y el brazalete y los instrumentos de manipulación del reloj (corona y pulsadores).
Acabado monocromático
Este juego de acabados se completa con la carátula, también gris, aunque ligeramente más oscura, y decorada con el guilloché Clous de Paris tan característico de la colección. Tampoco podemos olvidarnos de los contadores de la carátula, decorados con círculos concéntricos. Un cuidado por el detalle como reflejo del trabajo artesanal tan característico de esta firma histórica.
No hay cambios en el resto de los elementos del reloj. La caja mantiene su diámetro de 42 milímetros, con una altura de 12 milímetros y una hermeticidad de 100 metros. El cristal es de zafiro con tratamiento antirreflejos y viene acompañado de un fondo cerrado, atornillado a la carrura. El movimiento es el ya conocido GP03300, calibre manufactura bien contrastado, de carga automática y reserva de marcha de 46 horas.
FICHA TÉCNICA
GIRARD-PERREGAUX LAUREATO CRONÓGRAFO TI49