Lange 1 de A. Lange & Söhne, treinta años no son nada

El gran icono de A. Lange & Söhne celebra su trigésimo aniversario con cuatro referencias que se mantienen fieles al original.

El 24 de octubre de 1994 fue un día muy especial para Walter Lange y Günter Blümlein. Casi cuatro años después de anunciar la resurrección de la firma familiar (7 de diciembre de 1990), los dos impulsores de A. Lange & Söhne presentaban los cuatro primeros relojes de su catálogo. Uno de ellos llamó especialmente la atención.

Presentación de A. Lange & Sohne en 1994
Presentación de la primera colección de A. Lange & Söhne, celebrada el 24 de octubre de 1994. A la izquierda, Günter Blümlein aparece apoyado en una impresión amplificada del Lange 1.

Con su carátula descentrada y llamativa ventana de gran fecha, el Lange 1 era un reloj que mostraba carisma desde el primer instante y expresaba a la perfección la filosofía y estética que conformaban el proyecto de la nueva casa. Han pasado muchas cosas en estas tres décadas desde aquella rueda de prensa. A. Lange & Söhne ha logrado establecerse como uno de los grandes nombres de la Alta Relojería, con el marchamo especial de su origen alemán. Lo que sí se ha mantenido inalterado en todo este tiempo es la estética del Lange 1, ya confirmado como uno de los relojes más icónicos del siglo actual. Toda una leyenda. 

Cuatro referencias y dos tamaños

A. Lange & Söhne ha querido rendir tributo a su modelo más famoso con una edición conmemorativa compuesta por cuatro referencias. Las piezas se diferencian por el tamaño de caja y material de construcción. En el lado más exclusivo de la edición tenemos El Lange 1 y Pequeño Lange 1 elaborados con caja de platino y carátula de ónice. El platino es un metal no muy frecuente en el catálogo de A. Lange & Söhne, pero sí es habitual encontrarlo de manera esporádica en sus ediciones más prestigiosas.

Sí que es más raro encontrar el ónice, una piedra semipreciosa que aporta al reloj un acabado deslumbrante y con un toque natural. El Lange 1mantiene su tradicional diámetro de 38.5 milímetros, con un grosor de caja de 10 milímetros. A. Lange & Söhne lanzó en 1994 una versión más pequeña de modelo, conocido desde entonces como Pequeño Lange 1, con un diámetro de 36.8 milímetros. La diferencia de tamaños no supera los dos milímetros, aunque sí se nota puesto en la muñeca.

Esfera azul de reloj
Primer plano de la versión en oro rosa y carátula azul del Lange 1. La famosa gran fecha de A. Lange & Söhne está inspirada en el reloj digital de la Semper Opera de Dresde.

En los mismos tamaños se han lanzado las versiones con caja de oro rosa. Aquí volvemos al azul oscuro, uno de los colores característicos de A. Lange & Söhne, aplicado sobre a un disco de plata maciza, como es tradición en la manufactura sajona. Sin novedad en el apartado técnico, las cuatro referencias equipan el conocido calibre L121.1. Se trata de un movimiento de carga manual, fabricado en la manufactura de la firma en Glashütte e introducido en el catálogo de la firma en 2015 con motivo del vigésimo aniversario de la colección. A diferencia del anterior calibre (L901), el L121.1 ofrece hasta una reserva de marcha de 72 horas gracias a la presencia de un doble barrilete. 

Diseño icónico

El Lange 1 es un reloj diferente y, a la vez, muy práctico y sencillo de leer. Las agujas están en diferentes ejes para que no se sobrepongan. Cuenta además con la indicación de gran fecha, tan característica de A. Lange & Söhne e inspirada en el reloj de la Ópera Semper de Dresde. Un pulsador, corrector en el caso del Pequeño Lange, permite su cambio de un modo rápido y preciso. ¿Hacía falta una actualización del Lange 1 para su trigésimo aniversario? En A. Lange & Söhne han pensado que no. Y a nosotros nos parece perfecto. 

Lange 1 de A. Lange & Söhne de platino

Ficha tecnica

FICHA TÉCNICA

A. LANGE & SÖHNE LANGE 1 Edición 30 aniversario versión platino

    
Movimiento:
   
Calibre L121.1 de carga manual, 368 componentes, 43 rubíes, 8 engastes de oro, 21,600 alt/h, 72 horas de reserva de marcha.
   
Función:
   
Horas, minutos, segundos, gran fecha y reserva de marcha.
   
Caja:
   
Platino, 38.5 milímetros, cristal de zafiro con fondo transparente.
   
Carátula:
   
Plata recubierta de ónice negro. Agujas de oro.
   
Correa:
   
Piel de aligátor con hebilla de hebijón de platino.
   
Versiones:
   
300 piezas.
   
Precio:
   
60,000 euros (precio en Alemania)

Andrés Moreno

Decía Antonio Machado que el hacer las cosas bien importa más que el hacerlas. Me he guiado por esta máxima durante casi veinte años que llevo escribiendo de relojes. En mi mano está hacerlo del modo más ameno posible.

Artículo anterior

La otra cara del mito

Siguiente artículo

Viaje interestelar

Notas relacionadas
Leer más

A Horse With No Name

Hermès siempre destaca sus orígenes de manera creativa. Y ahora, como vemos en el del Slim d’Hermès Cheval Brossé, es turno de la abstracción.

MANUEL MARTÍNEZ

Director editorial

Me gusta encontrar y contar historias, desde hace 15 años con la relojería, el estilo de vida y el lujo como telón de fondo. Las revistas siguen siendo mi debilidad, así que en Tiempo de…

Alma Delia Pacheco

Directora comercial relojes

Heredé el gusto por los relojes desde niña y profesionalmente por el diseño. Desde hace 21 años estoy en este fascinante sector relojero, trabajando de la mano junto con las marcas haciendo estrategias comerciales y de marketing.

KEVIN GONZÁLEZ

Diseñador digital y multimedia

Geek millennial, amante de la tecnología. Ing. en comunicación multimedia, llevo los relojes mecánicos a la dimensión digital. Siempre al tanto de las tendencias tecnológicas.

LESLIE LÓPEZ

Director editorial

Lector antes que editor. Planté un limonero y escribí un libro. Espíritu deportivo para templar el ánimo. Ldo. en Filosofía (Univ. de Sevilla) y Máster de Periodismo (Complutense de Madrid).

CARLOS ALONSO

Director general

Los contenidos en evolución son su razón de ser sin que importe el soporte. “La vida y la relojería, donde se ha especializado por más de 30 años, no son nada sin contenido”. Después de que los soportes hayan vivido una revolución tecnológica es momento de volver a defender el buen periodismo como una necesidad general.

ANDRÉS MORENO

Redactor

Decía Antonio Machado que el hacer las cosas bien importa más que el hacerlas. Me he guiado por esta máxima durante casi veinte años que llevo escribiendo de relojes. En mi mano está hacerlo del modo más ameno posible.
Total
0
Share