Entre las muchas barreras que ha superado Richard Mille a lo largo de su carrera, quizás sea la fusión de la cultura popular con la Alta Relojería la tendencia que más ha calado en el gran público. Porque, a diferencia de las colaboraciones con grandes deportistas, estas referencias “populares” incorporan el humor como gran reclamo, una decisión controvertida entre las marcas más respetables, pero que ha encontrado un gran predicamento en las firmas de autor como MB&F, H. Moser & Cie. o el emergente Konstantin Chaykin.
El RM 88 Automatic Tourbillon Smiley confirma, una vez más, que una sonrisa es la mejor compañía que puede encontrar un reloj; del mismo modo que el placer, en todas sus variaciones, es parte esencial de nuestra idea del lujo. La nueva pieza de Richard Mille Smiley se suma ahora a anteriores creaciones como el RM 68-01 Tourbillon Cyril Kongo o el RM 52-05 realizado en colaboración con el músico y productor Pharrell Williams; sin olvidar la espectacular serie Bonbon de piezas inspiradas en el mundo de los dulces. Todas ellas, como el nuevo RM 88, llenas de color, buen humor y la tecnología relojera más puntera.
Tres años de desarrollo
Richard Mille ha aprovechado la celebración de los cincuenta años de la aparición del Smiley para hacer esta edición especial con el sonriente dibujo como gran protagonista. En apariencia, puede parecer un tema un poco frívolo. Puede ser, pero en Richard Mille se han tomado su desarrollo con extrema seriedad. Más de tres años se ha prolongado el desarrollo del RM 88 hasta dar con el resultado final. Un largo periodo de tiempo que tiene su explicación en la búsqueda del modo de incorporar los elementos decorativos en el interior del mecanismo y, lógicamente, la realización de estos; todos hechos a mano por el grabador Olivier Kuhn.
El RM 88 Automatic Tourbillon Smiley es como el El jardín de las delicias, el famoso cuadro de El Bosco expuesto en el madrileño Museo del Prado. Hay que ver la carátula en su conjunto y, a la vez, disfrutar de cada detalle. Son muchos los secretos que guarda el RM 88 en su interior. En primer plano encontramos un radiante Smiley de oro amarillo, acompañado de un arcoíris pintado a mano sobre un puente que ha sido incluido exclusivamente para el sostén de las diferentes microesculturas.
Unos días llueve y en otros sale el sol
Si nos fijamos con atención encontraremos un tourbillon. Está enmarcado en una jaula de tourbillon con PVD negro y oro. No es un tourbillon normal. Su plano superior está decorado con un disco de segundos que alterna la lluvia y el sol cada minuto. Como la vida misma.
La caja es una combinación de materiales, acorde con la línea estratégica de Richard Mille en los últimos años. El frontal y el fondo están realizados en cerámica blanca, mientras la carrura central es de oro rosa, rematada con una corona bicolor y grabada con la imagen una vez más de Smiley. La correa amarilla es el remate perfecto para la imagen colorista y alegre de un reloj que hace del buen humor su principal razón de ser.
FICHA TÉCNICA
RICHARD MILLE RM 88 AUTOMATIC TOURBILLON SMILEY