A Vacheron Constantin le sobra arte y ambición, como vuelve a quedar claro con el lanzamiento de Métiers d’Art Tribute to The Celestial. Es una serie de 12 referencias dedicadas a las constelaciones y sus signos del zodíaco asociados. Cada esfera tiene una ilustración guilloché hecha a mano, con las estrellas principales de la constelación representadas por diamantes. Es un trabajo de alta artesanía ultra exigente, propio de una firma legendaria que está celebrando su 270 aniversario.
Somos afortunados porque cada novedad que Vacheron Constantin presenta este año viene acompañada de algunos datos fascinantes que comparte la marca. Por ejemplo, que hoy en día se reconocen oficialmente 88 constelaciones. De ellas, 36 están situadas principalmente en el cielo boreal y 52 en el hemisferio sur celeste. Las primeras ya habían sido catalogadas en el siglo II d.C. por el astrónomo grecorromano Ptolomeo. Pero las segundas no fueron identificadas hasta que los pioneros navegantes neerlandeses comenzaron a cartografiar los cielos australes a finales del siglo XVI.
Y hay más. Entre las 88 constelaciones, las 12 zodiacales son las que se sitúan a lo largo del plano de la eclíptica. Es decir, de la trayectoria aparente del Sol a través del cielo visto desde la Tierra. Ya que el ciclo del paso del Sol por el zodíaco está alineado con las estaciones, las culturas antiguas usaron ese ciclo para determinar lo que luego se definió como año.
Historia zodiacal
Con Métiers d’Art Tribute to The Celestial, Vacheron Constantin reconoce el antiguo vínculo entre astronomía y astrología. Como recuerda la marca, en Babilonia y el antiguo Egipto, las funciones de astrónomo y astrólogo las hacía la misma persona. “Hasta los siglos XVII y XVIII, ambas profesiones se ejercieron codo con codo. Incluso los grandes astrónomos Galileo Galilei y Johannes Kepler practicaban también la astrología“, apunta.
Por supuesto, Vacheron Constantin tiene una larga lista de creaciones con temas celestiales y zodiacales. De hecho, la nueva serie se inspira en el Minute Repeater Tourbillon Sky Chart Leo Constellation Jewellery, una pieza única de 2021. La esfera de ese reloj representa el signo de Leo con guilloché figurativo y su constelación engastada con diamantes.
Hay otros ejemplos notables. Como un reloj de mesa Art Déco de oro, ónix, cristal de roca y lapislázuli con los signos del zodíaco hecho con Verger Frères en 1927. En 1996, la colección Mercator incluyó la Ref. 43050 con una esfera de esmalte policromado con los signos del zodíaco chino. Con motivo de su 250 Aniversario en 2005, la Maison presentó l’Esprit des Cabinotiers. En ese reloj misterioso, la esfera está rodeada por los 12 signos del zodíaco, creados en esmalte Grand Feu en miniatura.
En 2012 lanzó “La leyenda del zodíaco chino”. Esta serie de la colección Métiers d’Art se introdujo en un ciclo de 12 años con un signo por año. El calendario zodiacal también ha aparecido en las piezas únicas Les Cabinotiers Astronomica (2014), Referencia 57260 (2015) y The Berkley Grand Complication (2024). Este último es el reloj de bolsillo más complicado de la historia.
Esferas celestiales
Las esferas de estos 12 relojes de producción limitada tienen una ilustración de guilloché figurativo de un signo del zodíaco elaborada a mano. Esta técnica, desarrollada por el maestro guillocheur de Vacheron Constantin, va más allá de los patrones abstractos del guilloché clásico. Consiste en la creación de una multitud de triángulos con guilloché a mano formados por líneas rectas acumuladas, con cada triángulo colocado en un ángulo diferente respecto a sus vecinos. Para crear un solo signo del zodíaco se necesitan unas 16 horas.
Esta evolución de un oficio artesanal centenario como el guilloché se ha logrado gracias al taller Métiers d’Art de Vacheron Constantin. Sin duda, es un gran logro que enfatiza la importancia de que las grandes manufacturas relojeras pongan manos a la obra para preservar y hacer avanzar estas técnicas.
Además, la fabricación de cada esfera requiere ocho etapas separadas. Empieza con un fino disco de oro de 18 quilates que se marca con los contornos de las constelaciones y los signos del zodíaco. Después se aplica un acabado efecto “rayos de sol” y se añaden detalles opalinos a los cuatro signos con figuras humanas (Géminis, Virgo, Sagitario y Acuario). Sigue la decoración estilo guilloché a mano del signo del zodíaco. Al terminarla, se recorta la abertura para el tourbillon, tras lo cual se aplica el color azul.
Para definir el mapa de cada constelación, la esfera se mecaniza para revelar la base de oro en un trazado de líneas finas. Luego se aplica un barniz protector. Siguen los detalles finales. La impresión por transferencia de las marcas de minutos y segundos y el nombre Vacheron Constantin. La aplicación de los índices de oro blanco y el emblema de la Cruz de Malta de la marca. Y el engaste de los diamantes talla brillante que representan las estrellas principales de cada constelación.
El toque opulento
Las cajas de los relojes Métiers d’Art Tribute to The Celestial miden 39 mm y son de oro blanco. El toque opulento, pero elegante, lo brindan los 96 zafiros azules talla baguette engastados en el bisel, la corona, las asas y la hebilla. Esta labor le toma 27 horas al especialista del taller Métiers d’Art de Vacheron Constantin.
En el caso del bisel, el maestro engastador eligió la técnica del engaste en canal con las piedras sujetas entre dos carriles paralelos sin metal que los separe. Así se crea la impresión de un círculo ininterrumpido de zafiros que flotan. Por su parte, los diamantes talla brillante de la carátula recibieron un engastado en grano en el reverso. Por cierto, los índices horarios están decorados con un motivo de superficie estriado. De este modo evocan la geometría lineal de los zafiros baguette y las líneas finas que forman los motivos con guilloché.
Para impulsar estas 12 piezas, la Maison se decidió por el Calibre 2160 automático de apenas 5.65 mm de altura. Por ello, la caja mide 10.7 mm de grosor, perfecto para este nivel de elegancia. Cuenta con una masa oscilante periférica de oro y garantiza 80 horas de reserva de marcha. En cuanto a la decoración, también es muy Vacheron, con perlado para la platina, puentes biselados a mano y decorados con Côtes de Genève, ruedas de granulado circular y tornillos biselados y pulidos. Por el lado de la carátula, el tourbillon luce un tornillo azulado que contrasta con la barra pulida a mano y la jaula en forma de Cruz de Malta.
FICHA TÉCNICA Vacheron Constantin Métiers d’Art Tribute to The Celestial
- Movimiento: Calibre 2160, automático, masa oscilante periférica, 18,000 alt/h (2.5 Hz), reserva de marcha de 80 horas
- Función: Horas y minutos; segundero pequeño en la jaula de tourbillon
- Caja: 39 mm, oro blanco, 96 zafiros talla baguette engastados en el bisel, las asas y la corona, 30 m
- Carátula: Base de oro, motivo guilloché hecho a mano que representa cada uno de los 12 signos del zodíaco y la constelación correspondiente, estrellas engastadas con diamantes talla brillante, aplique de Cruz de Malta de oro blanco
- Correa: Piel de aligátor azul oscuro
- Versiones: 12 referencias, una por cada signo del zodíaco; certificación “Poinçon de Genève”; producción limitada