Por diferentes razones, son muchos los relojes del pasado que no tuvieron un gran éxito en el momento de su lanzamiento. Ha sido con el paso del tiempo cuando han ganado atractivo para los coleccionistas. El caso más famoso es el Daytona Paul Newman, aunque la industria relojera está repleta de más ejemplos. Entre ellos encontramos el IWC Fliegerchronograph Keramik, más conocido como Black Flieger o referencia 3705. Lanzado en 1994, este reloj pasó a la historia de la firma de Schaffhausen por ser su primer Reloj de Aviador de cerámica. A pesar de este factor innovador, o precisamente por esto, el 3705 tuvo una corta vida comercial y fue descatalogado a los pocos años con apenas un millar de piezas vendidas. Tuvieron que pasar más de dos décadas para que los aficionados volvieran a poner los ojos en él y lo convirtieran en objeto de deseo.
El creciente interés que esta pieza ha despertado entre los coleccionistas ha animado a IWC a recuperarlo en una edición limitada con el nombre de Reloj de Aviador Cronógrafo Edition ‘Tribute to 3705’. La similitud entre ambos modelos es evidente en las fotografías, pero esta edición especial es mucho más que la recuperación del codiciado original. A diferencia del antiguo Black Flieger, el ‘Tribute to 3705’ está fabricado en Ceratanium. Este material no tiene nada que ver con la cerámica usada por IWC en los años 90.
El Ceratanium está basado en el titanio, aunque el metal recibe un tratamiento térmico que le lleva a adquirir un aspecto y tacto similar a la cerámica. Podemos encontrar más relojes en el mercado fabricados con cerámica, pero solo en IWC fabricados con este avanzado material. Todos los componentes exteriores del reloj, hebilla de la correa incluida, están fabricados con él. En comparación, el 3705 únicamente tenía en este material la carrura central. Tanto la corona como los pulsadores eran de acero. Una limitación técnica de la época felizmente superada.
La carátula mantiene la estética del original. El diseño es el característico de los Flieger de IWC. La superficie negra en acabado mate busca reducir al mínimo los reflejos de los rayos solares. El blanco de las agujas e índices aportan el contraste adecuado para una legibilidad perfecta. Cómo no, se mantiene la disposición de doble ventana en el calendario; detalle que agradecerán los seguidores más fieles de la casa.
Movimiento manufactura
También cambia la maquinaria. Los medios de producción de IWC no son los mismo que hace casi tres décadas, convertida hoy en día en manufactura de pleno derecho. En lugar del Valjoux 7750 original, el calibre elegido en esta ocasión es el 69380 de fabricación propia. Es un movimiento automático que destaca por su robustez y, sobre todo, la inclusión de una rueda de pilares en la función cronógrafo. Este detalle técnico es evidente cuando apretamos los pulsadores. La reserva de marcha se queda en 46 horas.
Como indicábamos al principio, el este Reloj de Aviador Cronógrafo se lanzan en edición limitada. La cifra elegida es de 1,000 unidades, un número bastante alto que nos confirma la voluntad de la firma para que la pieza llegue a la mayor cantidad de aficionados que sea posible, aunque teniendo en cuenta en todo momento que se trata de un modelo especial. Más exclusiva es el método elegido para su venta. El reloj estará únicamente disponible a través de medios digitales. Las opciones disponibles son la boutique oficial de la propia firma en IWC, el portal exclusivo YNAP o, ya más centrados en el mercado chino, las plataformas WeChat y Tmall. Su precio es de 11,900 USD para Estados Unidos.