“Piensa en 1888, es una locura. Georges Favre-Jacot creó la empresa en 1865 a la edad de 22 años, y 23 años después, con 45 años, imaginó que la relojería serviría a la aviación y los instrumentos de vuelo, mucho antes de que incluso el primer avión despegara. En 1888, registró el término “PILOTe” y, posteriormente, “PILOT”, junto con nombres de otros ámbitos que consideraba prometedores”, comenta Julien Tornare, CEO de Zenith. El lanzamiento de la nueva colección Pilot era inesperado. Un cambio completo con una propuesta más comercial y muy sólida mecánicamente. “Tienes que esperar a principios del siglo XX para tener el primer reloj de piloto, para tener el primer avión volando, para tener el Santos famoso y todas las historias que sabemos que nos conciernen. Pero hemos estado protegiendo esos nombres desde entonces. Y seguimos haciéndolo cada 2 o 3 años, firmando un documento para asegurarnos de que el nombre es nuestro. Zenith sigue siendo la única marca de relojes que puede llevar la palabra ‘PILOT’ en sus esferas”. Julien Tornare habla alto y claro. “Recuerda que la derrota ya no existe”.
Un cambio radical
—Ha sido un gran cambio en el reloj y eso son riesgos que debes tomar.
—Sí y no porque ya sabes que el principal riesgo para la marca en el pasado ha sido volver demasiado hacia el pasado. Recuerda que la derrota ya no existe. Chronomaster se volvió un poco anticuado y polvoriento. Así que hemos estado rejuveneciendo esta línea de productos. Básicamente hacemos lo mismo con la colección Pilot. Confío en que va a ser genial y va ser grande porque ha habido un increíble entusiasmo de nuestros socios tras el lanzamiento. Sienten el potencial comercial de esta nueva línea de productos, que era bastante limitado con el otro. El modelo anterior parecía vintage, no todo el mundo quiere parecer vintage por el tamaño y el predominio de la corona que es muy grande, así que era un segmento para ciertas personas. La base y la legitimidad son increíbles. Hemos hecho cosas en el siglo xx. Mi predecesor Jean-Frédéric Dufour lanzó un vintage de bronce que todavía están aquí, sigue siendo un muy buen reloj. Pero decidimos traer una dimensión más contemporánea y así es como llegamos a un reloj de piloto muy moderno. No olvidemos que tenemos lo que llamamos “revival”, que es una especie de dimensión horizontal de cada cruce, de cada línea de productos. Y dentro de este concepto, por supuesto, vamos a relanzar algunos de los “pilots”.
—Parece que el legado Pilot estaba oculto en Zenit, ¿pudo ser por el éxito histórico del cronógrafo automático, El Primero?
—No lo sé, pero es totalmente cierto lo que dices. Aunque eso hace mi vida mucho más fácil y mejor. Y sucede lo mismo que con la historia de Charles Vermot. Cuando entré, dije: ¿chicos, por qué no hablamos mucho más de esta historia? Y por ello hablamos mucho de ello durante el 50 aniversario de El Primero. Ahora, el Pilot, cuanto más investigo sobre él, más cosas increíbles encuentro en Zenith. Así que hablemos de ello. Hagamos que más gente sea consciente de esto. Eso es exactamente lo que tenemos que hacer. Es compartir más sobre historias reales. Conoces algunas marcas que nunca voy a mencionar, pero que están inventando historias para crear marketing. Y nosotros lo tenemos dentro, pero no lo decimos, ¡me mata! Así que ahora tenemos que ser mucho más dinámicos en eso.
“Alcanzar la estrella”
—¿Cuáles son las características claves de la nueva colección?
—Dos cronógrafos. El Big Date, que es instantáneo, que es una declaración bastante increíble, y el Flyback, con algunos colores para hacer el enlace con el arcoíris. A la gente le gusta ver esto. Y, por supuesto, la pieza de tres manecillas, un poco más pequeña de 40 mm, en las que realmente estamos haciendo grandes volúmenes. Este es un reloj realmente muy agradable de ver, absolutamente magnífico. Y la tecnología es increíble. El diseño, el aspecto y la sensación, la historia. Es un producto increíble. Estoy muy emocionado de lanzarlo este año.
—En la campaña no se ve el lenguaje clásico sobre relojes de pilotos.
—No, no, en absoluto. Y creo que eso es también lo que le gusta a la gente, que adoptamos un ángulo diferente. Aportamos un nuevo espíritu. Es mucho más estilo de vida, si quieres. En comunicación, Pilot para nosotros es mucho más que una referencia a la aventura, a lo que Louis Blériot hizo cuando cruzó el canal. Nuestro fundador estaba muy enfocado en alcanzar su estrella. Cuando alcanzas tu estrella, el cielo es el límite, el cielo es tuyo. Es hora de alcanzar tu estrella. Eso es exactamente lo que quería para empujar los límites. Y para nosotros es exactamente esto, por eso nunca vamos a entrar en aviones de combate o aviones comerciales. Se trata más de la filosofía detrás de viajar y la emoción de la campaña con aviones de papel, por ejemplo. Es muy importante porque nos lleva a todos a nuestra infancia, todos en algún momento jugamos con ellos, es un concepto completamente diferente.
Puertas abiertas
—Que el pasado año fuera récord en la industria, ¿ayuda a lanzar un producto completamente nuevo? Es la edad de oro de la relojería.
—Ayuda mucho y creo que es realmente un buen impulso para nosotros lanzarlo. Pero es difícil usar el término “edad de oro” porque lo oímos hace 10 o 15 años. Sí, es cierto. Hoy estamos al borde de algunos cambios. Hace unos años nos asustaba que la generación más joven no llevase un reloj mecánico, o que sólo llevaran un celular en la muñeca, un reloj conectado. Hoy podemos sentir que no es así. Las nuevas generaciones están mucho más informadas, saben mucho más porque tienen tanto acceso a la información gracias a las redes sociales, web, etc., y tenemos que ser aún más estratégicos en nuestra comunicación y tenemos que ser transparentes. Tenemos que ser honestos. Recibo muchos elogios de los jóvenes diciendo que lo que les gusta de Zenith es que somos muy claros en lo que hacemos. Podemos visitar la manufactura porque están las puertas abiertas. Todos los relojes tienen el fondo abierto porque estamos orgullosos de mostrar lo que ponemos en el interior del reloj, El Primero, y lo asumimos. Les gusta Zenith porque sigue siendo muy honesto y una auténtica marca con una larga herencia, pero que se expresa en la forma moderna.
—Este lenguaje fresco viene ahora con un montón de colores en la relojería. Estás trabajando con este nuevo enfoque, tocando los colores.
—Exitoso. Sí, funciona muy bien. Hoy no debemos ser tímidos. No debemos ser solo blanco y negro. Debemos ser capaces de traer colores en la vida en general y por eso traemos colores a nuestros relojes. Hay algunos colores de los que no vamos a hablar hoy, pero los verás durante el año porque tenemos algunas sorpresas. Esto ha sido un gran aprendizaje de la situación COVID, en el pasado las marcas estaban presentando todo aquí y luego durante 10 meses, no haces mucho. Es decir, ves a tu distribuidor, ves tu precio, pero lo anuncias todo. Con COVID, hemos aprendido que es interesante tener lanzamientos como un goteo durante todo el año. Son ciclos más rápidos. También es una oportunidad para captar la atención cuando hay menos expectación porque hoy en día [Watches & Wonders] todas las marcas están lanzando. Lanzar demasiadas cosas podría ser un desperdicio porque te vas a centrar en el tema principal y olvidarás el resto. Y créeme que tenemos otras piezas que son increíbles.
—Mencionas el ciclo de vida del producto, cada día más corto, pero necesitas tiempo para desarrollar productos y fabricarlos. Los relojes no se hacen como un pantalón o una chaqueta.
—Es un trayecto, es realmente un proceso. Tienes toda la razón, en cuanto a la limitación de la producción y la limitación del desarrollo del producto. Necesitamos mucho tiempo, pero el mundo va cada vez más rápido, así que tenemos que hacer concesiones y tenemos que encontrar maneras. Cuando lanzas algo, no es porque tenga un año o dos, es un producto viejo. Es todavía nuevo para nosotros en términos de producción, pero, por otro lado, por la moda y las redes sociales, va tan rápido que el ritmo es diferente y tenemos que jugar entre ambos.
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“Una pesadilla”
—Otro tema interesante es el nuevo acercamiento al esqueletado en el Defy Skyline. Tienes El Primero y es un enfoque diferente. ¿Qué significa para ti este ejercicio del esqueletado?
—Es una pesadilla. Y la gente no siempre se da cuenta de que cuando esqueletizas un movimiento no es que solo coges un movimiento y lo cortas por dentro y va a estar bien. Es un trabajo de locos. Es casi como desarrollar un nuevo calibre. Y desde el punto de vista de las ventas, no es tan fácil. Es una gran restricción. Es un nuevo desarrollo completo, ya nos conocen por los relojes esqueletados, desde hace unos años lanzamos esqueletos que son muy modernos. Aquí es más sobre la mecánica que se ve, pero no de una manera tradicional. Es muy moderno, un acercamiento muy mecánico, y eso es lo que nos gusta. Ya hemos tenido éxito con el Defy Clásico y el Defy 21 y ahora, por supuesto, con el Defy Skyline. No son demasiados, pero seguimos. Cuidamos que en los relojes esqueleto aún se pueda leer la hora porque a veces la visibilidad es tan mala que, que disfrutas del mecanismo, pero no sabes ni qué hora es. Así que es algo a lo que prestamos atención. Es un buen equilibrio entre la estética y el desarrollo técnico.
—Entonces tras la sorpresa del Pilot, ¿vienen más?
—Sí, más colores, algunos de alta complicación. Un par de complicaciones muy altas, muy cool que vendrán en los próximos meses, que les encantarán. Algunos materiales, algunos muy extremos que verás en la colección y que serán muy sorprendentes. ¿Dar una probada? [risas] A largo plazo, hemos estado reposicionando Defy, Chronomaster, ahora el Pilot, pero no me olvido del cuarto producto, que es Elite. Estoy trabajando para recuperarlo porque creo firmemente que los relojes clásicos, finos, elegantes no se han perdido para siempre. Es cierto que en los últimos años se ha apostado mucho más por el sport-chic, el acero, estilo informal, etc. Pero creo que el clasicismo en relojería volverá. Así que estamos trabajando, nos estamos inspirando. También tenemos relojes preciosos de los años 50. En de un par de años tendremos un par de sorpresas al respecto. No olvidamos los relojes clásicos.
Más Dreamers
—Por último, ¿cómo será la nueva plataforma de mentores de Dreamers de Zenith?
—Formarán parte de un programa de mentores en el que pasarán tiempo con las personas que se apunten. No podemos tomar a todos, pero haremos una selección de personas que estén con en el proyecto, cualquier tipo de proyecto, y quieren alcanzar su propia estrella y su propio éxito. Podrán intercambiar ideas con tenistas, pilotos de rally como Catie Munnings, y diferentes damas que han tenido éxito en su campo. Así que ofrecemos la plataforma para promover también el empoderamiento de las mujeres. Te inspiran muchísimo. Pero Dreamers es una plataforma en la que estas mujeres pueden inspirar a mujeres y hombres, no queremos hacer diferencias. Es global. Así que ofrecemos la plataforma para promover también el empoderamiento de las mujeres
—¿Y no has pensado en este programa con tus embajadores masculinos?
—Somos ‘genderless’ en Zenith y estamos muy orgullosos de asumirlo. Hacemos hermosos relojes y campañas y cosas diferentes. Tú decides si te suena como hombre o como mujer. No estamos aquí para poner categorías. No nos gusta eso. No me gusta categorizar a la gente, ni siquiera en mi propia vida, e intento no categorizar nunca a la gente por lo ricos que son, de qué raza o nacionalidad. No me gusta, en absoluto, porque tengo amigos de todas partes y no me gusta esta segmentación que hemos tenido en la relojería de hombres, mujeres y estas ideas como que a los asiáticos les gustan los relojes pequeños. Para mí, esto es muy de la sociedad pasada. Así que eliminamos eso. Hacemos relojes bonitos y los clientes decidirán.
La firma ha lanzado tres nuevas ediciones para boutiques del DEFY Skyline de 41 mm y 36 mm —una con diamantes— en color azul cielo
