La versión de triple calendario no ha sido la única novedad que nos ha traído Zenith en esta LVMH Watch Week. La manufactura suiza nos demuestra una vez más la importancia de los colores dentro de la relojería actual y presenta una versión verde del Chronomaster Sport. ¿Alguien había pensado que este color se había pasado de moda? Si es así, sentimos decirle que está equivocado. El año pasado este color triunfó en originales modalidades aguamarina, con tonos muy cercanos al azul y el gris. El verde del nuevo Chronomaster Sport vuelve al matiz original. Es un verde potente, alegre y pensado para no pasar desapercibido. Y la mezcla funciona a la perfección con el espíritu deportivo del Chronomaster Sport, uno de los grandes éxitos de los últimos años de Zenith y que avalan el paso de Julien Tornare a los mandos de TAG Heuer.
Especial, aunque no el primero
Zenith juega sobre seguro con esta nueva versión del Chronomaster Sport. Cuenta con el antecedente de una edición especial que la firma lanzó el pasado otoño con su embajador Aaron Rodgers y que tenía la particularidad de incorporar un bisel de cerámica verde con la carátula en el mismo color. Aquel reloj, lanzado en edición limitada de 250 piezas, tenía también otra curiosidad que no aparece en esta ocasión: los índices horarios de números romanos. Este modelo aún está disponible en venta exclusivas en las boutiques de Zenith.
Aquí volvemos a los tradicionales apliques longitudinales y al acabado tricolor de los contadores de la carátula, un símbolo que Zenith ha recuperado dentro de su colección y que vincula su producto actual con los modelos El Primero lanzados a finales de los años sesenta. La combinación de contadores tricolor con bisel de cerámica estaba hasta ahora solo disponible con las carátulas en negro y blanco, esta última también con caja de oro rosa.
Deportivo preciso
Sin novedad en el apartado técnico, algo que sin duda agradecerán los seguidores de este deportivo y exitoso reloj. La caja es de acero con un diámetro de 41 milímetros y hermética hasta 100 metros. Si nos fijamos en la escala del bisel, veremos que no es una taquimétrica, sino que está graduada en diez segundos, con su correspondiente sección de décimas. Cuando Zenith lanzó el Chronomaster Sport tenía muy claro que debía explotar las virtudes de su famoso movimiento El Primero. Y la más destacada de todas ellas es su precisión hasta la décima de segundo, gracias a su funcionamiento con una frecuencia de 36.000 alternancias a la hora. La versión 3600 del movimiento El Primero aprovecha esta característica para ofrecer una lectura muy precisa del tiempo cronometrado gracias al uso de una trotadora que completa una vuelta a la carátula cada 10 segundos.
Una de las claves para obtener éxito en el mercado consiste en diferenciarse de la competencia con un producto reconocible y que aporte una ventaja exclusiva. El calibre El Primero 3600 cumple a la perfección con este cometido.
Aunque no es novedad el bisel verde dentro de la línea Chronomaster Sport, si lo es que venga acompañado de una correa de caucho del mismo color que la carátula. También existe la opción de adquirirlo con el brazalete de acero a juego con la caja.
Turno de las piedras preciosas
Las novedades del Chronomaster Sport no se limitan a esta versión verde. LVMH Watch Week también nos ha traído la primera referencia joya de la colección. La versión parte del modelo en oro rosa con brazalete del mismo material y caja de 41 milímetros. Aquí desaparece el bisel con escala y en su lugar encontramos un engaste de piedras en talla baguette que incluye diamantes, espinelas negras y zafiros grises y azules. Zenith se apunta de este modo a la tendencia sport-chic que con tanto éxito llevan explotando desde hace años firmas como Rolex y Audemars Piguet. El mensaje es muy claro y nos confirma en qué liga quiere jugar la manufactura suiza en estos momentos.
Además del engaste del bisel, esta versión cuenta con una carátula de meteorito en el mismo tono dorado de la caja. Los índices de barra han sido sustituidos para la ocasión por diamantes en talla baguette. Eso sí, no falta el acabado tricolor en los contadores del cronógrafo que, como hemos contado en el anterior modelo, ya se ha convertido en uno de los símbolos de la colección.
Poco a poco, el Chronomaster Sport se va consolidando como una de las referencias más importantes de Zenith. Lo tiene todo para triunfar. Mucho más ahora, con una oferta cada vez más amplia de versiones y acabados. Veremos cómo sigue evolucionando en el futuro.
FICHA TÉCNICA
ZENITH CHRONOMASTER SPORT GREEN
FICHA TÉCNICA
ZENITH CHRONOMASTER SPORT