La vuelta a los orígenes es el mejor camino para recuperar la esencia. Roger Dubuis vira su estrategia comercial. Después de unos años centrada en la superrelojería deportiva, la manufactura ginebrina aprovecha el trigésimo aniversario de su fundación para un nuevo comienzo. Es razonable pensar que parte de esta reencuentro con las raíces se deba al interés que las primeras piezas de la firma están teniendo entre los coleccionistas. En cualquier caso, sin duda que es una decisión acertada, porque Roger Dubuis tiene un inmenso legado en sus tres décadas de trabajo.
Este trabajo de “renacimiento” tiene un pilar claro en la figura de Roger Dubuis como fundador de la casa. El prestigioso relojero unió fuerzas con el empresario portugués Carlos Dias para iniciar una aventura que marcaría el camino de la Alta Relojería a finales del siglo pasado e inicios del actual. Fue un proyecto tan espectacular como ambicioso, basado en una idea de manufactura total (todos los movimientos usados en su colección eran de producción propia) y con la novedad en aquel momento de tener la totalidad de la producción avalada por el Punzón de Ginebra.
Complicaciones recuperadas
Son muchas las señas de identidad que caracterizaron la primera etapa de Roger Dubuis. Entre todas ellas, una en concreto ha sido elegida para representar este nuevo rumbo. Nos referimos a la indicación bi-retrógrada, usada por Roger Dubuis en sus primeros modelos y la cual desarrolló en colaboración con Jean-Marc Wiederrecht antes incluso de comenzar la firma que lleva su nombre. La aguja retrógrada es una complicación en apariencia sencilla, aunque muy vistosa de observar y que define el diseño de las carátulas. Su uso en dos (¡o incluso tres!) indicadores marcó de manera muy especial la estética de los primeros calendarios de la manufactura hasta hacerlos fácilmente distinguibles del resto de la competencia.
El equipo de desarrollo de Roger Dubuis ha partido de esta complicación en las dos piezas que han presentado en Watches & Wonders. La primera, también muy interesante, es el Excalibur Biretrograde Calendar, que se convierte en pieza clave en el nuevo catálogo de la casa al ser su referencia de menor precio. El segundo modelo es el Roger Dubuis Excalibur Grande Complication, un nombre que ya nos da una buena idea de por qué lo hemos elegido para este artículo.
Relojes “todo en uno”
Hay un error bastante extendido en relojería por el cual entendemos como gran complicación un modelo con una complicación muy elaborada. En realidad, un gran complicación es una cuestión de cantidad y no de calidad. Se denominan así los relojes que acumulan tres o más funciones de distinta naturaleza. Su dificultad de realización hace que estos relojes sean los más escasos (y caros) del mercado, aunque en la pasada edición de Watches Wonders vimos nada menos que tres: este de Roger Dubuis, el Les Cabinotiers Solaria Ultra Gran Complicación – La Première de Vacheron Constantin y el 5308G de Patek Philippe.
Centrados en Roger Dubuis, realizar un Grande Complication es otro modo de volver a las raíces de la marca y, de paso, demostrar a los nuevos aficionados el impresionante saber técnico de la manufactura. Roger Dubuis ya lanzó en 2009 un gran complicación con el calibre RD0829 con las mismas complicaciones que vemos en el modelo de 2025.
Excalibur, un clasicismo diferente
La colección elegida para presentar el RD118, el nuevo calibre de gran complicación, es Excalibur. No fue la primera colección de Roger Dubuis, pero sí la más veterana de cuantas conviven hoy en su catálogo. Excalibur fue presentada en 2005 y pronto se convirtió en su línea más popular gracias a su fácilmente distinguible bisel con incisiones. Además, Excalibur es una línea muy versátil, capaz de aparecer en las referencias más deportivas y en las más clásicas, como este Roger Dubuis Excalibur Grande Complication.
Sobre la base de la caja Excalibur de 45 milímetros encontramos un frontal naked, presidido por los dos contadores retrógrados del calendario. En una posición inusual asimétrica, el resto del espacio está ocupado por dos discos más del calendario (meses y años bisiestos), además del tourbillon volante a las 5 horas, con aguja de segundero incluida.
Todo la presentación es muy refinada y, sin embargo, para nada tradicional. La disposición elevada de los contadores y los discos aporta al reloj una gran riqueza visual, al igual que los componentes del movimiento parciamente visibles. Su acabado es plateado para destacar el contraste con el resto de los elementos. También es en plateado el tourbillon volante, con la característica forma de trébol que siempre han tenido estos órganos reguladores en su catálogo. Tampoco hay que perder de vista la presencia del Punzón de Ginebra en el frontal, destacando así la importancia que siempre ha tenido este reconocimiento en la historia de Roger Dubuis.
Movimiento con sello propio
En el lateral de la izquierda encontramos el pulsador de la repetición de minutos. Roger Dubuis apuesta por este sistema de activación en lugar de la pestaña deslizante. Más moderno y que cuenta con un dispositivo de “todo o nada” que únicamente activa la melodía si se aprieta el pulsador hasta el final. Un modo de evitar la rotura del mecanismo por una activación accidental del mismo.
La manufactura lanzó en 2020 el Excalibur Diabolus in Machina, un repetición de minutos que destacaba por su musicalidad y uso de una melodía tritono. Aquel mecanismo sirve de base de trabajo para esta complicación en el nuevo calibre RD118.
Otro viejo conocido por los seguidores de Roger Dubuis es el doble microrrotor de carga. Este sistema de energía también fue común en la primera época de Roger Dubuis convirtiéndose en otro de sus signos distintivos más importantes. El doble microrrotor de carga era algo extrañísimo de ver en aquellos momentos en el mercado, con la única excepción del muy veterano relojero artesanal Paul Gerber.
Una nueva era
El Excalibur Grande Complication y su hermano pequeño Excalibur Biretrograde Calendar vislumbran una nueva era para Roger Dubuis de enorme potencial creativo y comercial. El reencuentro con sus raíces y la recuperación de la figura de Roger Dubuis aportan una base sólida sobre la que edificar la puesta al día de una manufactura que se ha ganado la admiración de los aficionados en estos treinta años de trayectoria.
FICHA TÉCNICA
ROGER DUBUIS EXCALIBUR GRANDE COMPLICATION