Ya hemos comentado en anteriores ocasiones que Zenith vive un momento dulce. De la mano de Julien Tornare, la manufactura suiza ha realizado un completo lavado de cara de toda su colección para hacerla más atractiva a las nuevas generaciones. Y los resultados están a la vista. El Chronomaster Sport o toda la nueva Defy, con mención especial al Defy Skyline, han reverdecido el interés por esta venerable marca. Se suma a esta lista de novedades el Zenith Pilot con una estrategia de producto fiel a la nueva política de la firma.
Cambio radical
Toda revolución lleva su tiempo. En el caso de Zenith, son ya seis años desde que Tornare se hizo con las riendas de la compañía. Una etapa en la que, de manera constante, se han actualizado todas sus colecciones. Faltaba Pilot, quizás no entre las más conocidas, pero sí buen reflejo de los orígenes de la firma de Le Locle. No en vano, Zenith presume de ser la primera firma del mundo en lanzar un reloj bajo el nombre de Pilot, lo que le ha otorgado el derecho a su uso comercial.
La anterior etapa de Zenith Pilot comenzó en 2012 con una curiosa estrategia de producto que combinó una línea de aspecto más contemporáneo con una colección vintage (Type XX) que acabó apropiándose del nombre.
¿Cómo eran estos relojes? Pues un buen ejemplo del gusto de la época, con un marcado estilo retro, cercano incluso al steampunk. Zenith apostó fuerte por la colección Pilot. Realizó multitud de versiones con diferentes tamaños, colores y materiales. Algunas ediciones limitadas fueron bastante locas, como aquel modelo Grand Feu con carrura de zafiro y nada menos que 60 milímetros de diámetro. No han pasado diez años de aquel modelo y ya nos parece de una época de lo más remota. Para que después digan que la relojería es muy conservadora.
Lo práctico como obsesión
Como decimos, el nuevo Pilot rompe con ese estilo vintage de la anterior etapa. El nuevo Zenith Pilot es un reloj eminentemente práctico. Aquí no hay experimentos: está pensado para que guste a todo el mundo.
El diseño es muy funcional. Prima la lectura óptima de la carátula. Los números árabes, con un generoso tratamiento luminiscente, destacan sobre la superficie negra de la carátula. Una decoración con acanaladuras horizontales evita la excesiva simpleza del conjunto.
El Primero omnipresente
Zenith es una firma de mecanismos y estos siempre tienen que estar presentes en sus grandes referencias. El Zenith Pilot incluye dos clases de movimientos, ambos de la familia El Primero. El más importante es lógicamente el cronógrafo. Se emplea en esta ocasión en su variante 3652, caracterizada por la función flyback y una ventana de gran fecha, situada entre el eje central y el índice de las 6 horas.
Sin duda es la versión que más atención atraerá de la nueva colección Zenith Pilot. Es un cronógrafo de aspecto clásico y versátil, pensado para ser usado en todo momento o situación. La caja tiene un diámetro de 42.5 milímetros y es hermética hasta 100 metros.
La manufactura ha tomado la curiosa, y un tanto arriesgada, decisión de incorporar también un movimiento El Primero (3620) en la versión de tres agujas del Zenith Pilot. La firma ya cuenta con un movimiento automático sencillo (Elite), pero es consciente de la atracción que El Primero suscita entre sus seguidores, lo que sin duda ha sido crucial para tomar esta decisión. Entre las ventajas que incluye el uso de este calibre, aparte de su gran precisión, encontramos una mayor reserva de marcha, que alcanza las 60 horas. Más pequeño que el cronógrafo, el Zenith Pilot Automatic tiene un diámetro de 40 milímetros y también es hermético hasta 100 metros.
Cerámica o acero
La oferta del Zenith Pilot es muy simple para esta primera temporada de la nueva colección. Consiste en dos mecanismos diferentes y dos acabados. Combinadas las variables, son cuatro las referencias disponibles. Más sencillo, imposible.
Las variantes de movimiento ya las hemos repasado. Queda por material de fabricación. El Zenith Pilot se ha lanzado en versiones en acero y cerámica negra. Las primeras tienen un precio más competitivo, mientras las referencias en cerámica destacan por su acabado monocromático y características propias de este material tecnológico (resistencia a los arañazos, ligereza y más agradable al tacto). La elección es puramente estética, sin diferencias técnicas entre las versiones.
Para los más detallistas
Un detalle curioso que sí nos ha llamado la atención en uno de los cuatro modelos es el uso de los códigos cromáticos de los antiguos Zenith en la versión Pilot Big Date Flyback de acero y que no se repiten en la versión Automatic con el mismo material. Si prestamos atención, veremos que el contador de minutos del cronógrafo está decorado con los colores azul, verde y amarillo; aparte de la llamativa decoración en rojo del segundero. Los más expertos ya habrán reconocido este código: se trata del mismo usado en el exitoso cronógrafo Rainbow de 1997 y que años más tarde recuperó Zenith para una versión del ya descatalogado Stratos. Un guiño histórico que sirve para perpetuar el legado de los grandes cronógrafos de aviador de Zenith.
El colores del contador de minutos del cronógrafo identifican a la versión Zenith Pilot Flyback Big Date como la sucesora del mítico Rainbow.
FICHA TÉCNICA
ZENITH PILOT BIG DATE FLYBACK
FICHA TÉCNICA
ZENITH PILOT AUTOMATIC
FICHA TÉCNICA
ZENITH PILOT BIG DATE FLYBACK
FICHA TÉCNICA
ZENITH PILOT AUTOMATIC