Una luna hipnótica

Arnold & Son continúa su culto a la Luna con una nueva versión de Perpetual Moon, con caja de platino y esfera con decoración “Stellar Rays” color “Celestial Blue”

La obsesión de Arnold & Son por la Luna da resultados extraordinarios. La firma suiza tiene dos colecciones dedicadas a este satélite, Luna Magna y Perpetual Moon. En todos sus relojes la complicación astronómica de las fases lunares tiene un protagonismo en la esfera que hipnotiza. Ahora, una nueva versión del Perpetual Moon nos sumerge en los misterios de este satélite gracias a una esfera impresionante y una elegante caja de platino.

Perpetual Moon apareció en el mercado en 2013 con una esfera con decoración guilloché tradicional y la representación grande y realista de la Luna de 11.20 mm. Le siguió otro modelo con dos lunas, que mostraba la posición de la Luna en ambos hemisferios. Luego llegó Perpetual Moon con esfera de obsidiana. En 2022, la línea redujo el diámetro de la caja a 41.5 mm (era de 42 mm) y lanzaron las carátulas con decoración “Stellar Rays”, en salmón y azul real. El modelo lanzado este año conserva el diámetro de la caja, pero con un bisel más delgado que da todo el protagonismo a la esfera única.

Rayos irregulares

La decoración de pliegues profundos “Stellar Rays” está grabada con rayos irregulares, que producen un efecto de sombra y luz que deslumbra. El color de la carátula, bautizado por la firma como Celestial Blue se obtiene gracias a un tratamiento especial con PVD que se recubre con varias capas de laca transparente.

La Luna brilla en la parte superior del dial. Realista y con las sombras pintadas a mano, es de nácar blanco con Super-LumiNova. Descansa sobre un cielo granulado, con un tratamiento PVD azul oscuro. En la escena, está rodeada de las constelaciones de la Osa Mayor y Casiopea, también pintadas a mano y recubiertas de material luminiscente.

Estas coordenadas de la galaxia están conectadas con Arnold & Son. Remiten a los cronómetros marinos de John Arnold, donde la Osa Mayor y Casiopea siempre sirvieron de referencia a los hombres de mar. Y es que a media distancia entre ambas constelaciones está la estrella polar. La posición de esta señala el norte, mientras su posición en el plano norte/sur permite estimar la distancia al ecuador, es decir, la latitud. Antes de la invención de instrumentos para calcular la longitud, era el método más fiable para conocer la posición de un barco en el océano.

Perpetual Moon 41.5 Platinum “Celestial Blue” late con el calibre de cuerda manual A&S1512. Tan preciso que tendrán que pasar 122 años hasta que este movimiento acumule un día de desajuste entre la visualización y la realidad celeste. Este calibre de manufactura tiene dos barriletes y una frecuencia de oscilación de 21,600 alt/h, que permite una reserva de marcha de 90 horas. Los acabados del movimiento incluyen Côtes de Genève radiantes en la platina principal, puentes pulidos y biselados, ruedas circulares satinadas y tornillos pavonados y biselados.

El reloj viene con una correa de piel de aligátor azul cosida a mano con una hebilla ardillón de oro blanco de 18k. El Perpetual Moon 41.5 Platinum “Celestial Blue” es una edición limitada de 38 relojes.

Ficha tecnica

FICHA TÉCNICA

Arnold & Son Perpetual Moon 41.5 mm Platinum “Celestial Blue”

    
Movimiento:
   
Calibre A&S1512, cuerda manual , 27 rubíes, 21,600 alt/h, reserva de marcha de 90 h
   
Función:
   
Horas, minutos, fases de la luna, indicador de la segunda fase de la luna en la parte posterior.
   
Caja:
   
Platino, 41.5 mm de diámetro x 11.30 mm de grosor, fondo de caja de cristal de zafiro, sumergible hasta 30 m.
   
Carátula:
   
Azul celeste con decoración “Stellar Rays”, cielo azul medianoche con constelaciones pintadas a mano luminiscente, luna de nácar con detalles pintados a mano luminiscente.
   
Correa:
   
Aligátor azul cosida a mano, hebilla ardillón de oro blanco de 18 quilates.
   
Versiones:
   
Edición limitada de 38 piezas.
   
Precio:
   
CHF 46,600
Yolanda Ruiz

Periodista todoterreno, llevo más de una década tomando el pulso a la industria relojera. “De los relojes lo que más me asombra es cómo actúan como instrumento de identidad. Son testigos de los cambios sociológicos y culturales».

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